Los ciudadanos volvieron a salir a las calles de la capital del país para manifestarse en contra del llamado gasolinazo, y ayer en distintos momentos hubo cuatro movilizaciones del Ángel de la Independencia al Zócalo para exigir dar marcha atrás al impuesto que dio el incremento en el precio de los combustibles.

Ciudadanos sin filiación partidista, taxistas, religiosas, estudiantes y simpatizantes de un partido político se movilizaron en esta ruta en diferentes horarios. Las protestas comienzan a perfilar posibles acciones contra esa medida, como la presentación de amparos, dejar de pagar impuestos y convocar a un paro nacional para el 31 de enero.

Asimismo, los ciudadanos convocaron a la desobediencia civil y a seguirse organizando para que en lugar de varias manifestaciones con poca participación se concrete una gran marcha nacional con miles de personas.

Una de las personas inconformes con las alzas, la señora Lolita, llamó a generar una mayor coordinación, pues ‘‘nos estamos desgastando en muchas marchas con poca gente. Debemos organizarnos mejor para, a través de redes sociales, de boca en boca o de la forma que sea, convocar a una gran movilización. Veo una total descordinación. Es hora de cambiar esto, porque es una burla, es pisotear a todos los mexicanos; tenemos que unirnos para recuperar nuestra dignidad’’.

Por cuarto fin de semana consecutivo desde que entró en vigor el alza en gasolinas y diésel, el primero de enero, los ciudadanos salieron a manifestarse contra esa medida y en todas las protestas los reclamos y consignas se dirigieron contra el titular del Ejecutivo federal, Enrique Peña Nieto, a quien se señala como el responsable de esa medida.

En mantas, carteles y a gritos, la consigna más escuchada a lo largo de las cuatro movilizaciones fue: ‘‘Fuera Peña, fuera Peña’’. De acuerdo con monitores del Gobierno de la Ciudad de México, unas 5 mil personas participaron en todas las movilizaciones que se realizaron ayer en la capital el país.

La primera marcha salió de la Columna de la Independencia después de las 10 de la mañana y arribó al Zócalo casi una hora después. A la una de la tarde, otros 300 ciudadanos hicieron el mismo recorrido. A las 14 horas, otros tantos que se concentraron en el Ángel entonaron el Himno Nacional y después marcharon hacia la Plaza de la Constitución, en tanto que integrantes del Comité Ciudadano de Defensa –que algunos ubican como cercano al Partido del Trabajo (PT)– también marcharon en la misma ruta.

Un grupo de religiosas se sumó a la protesta en el Zócalo al mediodía y al grito de ‘‘la gente se pregunta y Cristo dónde está, Cristo está en el pueblo exigiendo libertad’’, y “la Iglesia consciente está presente’’ y ‘‘únete, pueblo, no somos del PRI, somos la Iglesia luchando por ti’’.

Más tarde, cuando representantes de la tercera marcha tomaban la palabra con un pequeño altavoz al pie del asta bandera del Zócalo, llegó a la Plaza de la Constitución la movilización del grupo identificado con el PT.

En principio, los ciudadanos que ya estaban ahí gritaron: ‘‘únanse, únanse’’. Y hubo hasta muestras de entusiasmo por el camión de sonido que acompañaba a esta movilización. Sin embargo, tomó la palabra Óscar González Yañez, aspirante al gobierno del estado de México por el PT; al darse cuenta de ello los ciudadanos de inmediato manifestaron su enojo y las consignas de apoyo se transformaron en un rechazo generalizado al grito de ‘‘no partidos, no partidos’’. Al final no hubo incidentes y los manifestantes se retiraron en calma.

Al término de las marchas se llamó a seguirse sumando a todas las actividades contra el gasolinazo, como a las asambleas populares que habrá la próxima semana y a las acciones del 31 de enero.