La campeona paralímpica recibirá el martes el PND 2016
Se preparará con más tranquilidad en el proceso rumbo a Tokio 2020
Sábado 21 de enero de 2017, p. a11
La campeona paralímpica Lenia Ruvalcaba decidió no competir este 2017. No porque se retire, sino para dar prioridad a su salud, ya que será intervenida dentro de dos semanas del ojo izquierdo por el estrabismo que padece de nacimiento y prefiere esperar hasta el año siguiente para comenzar el proceso hacia Tokio 2020.
Única judoca del mundo con debilidad visual en competir en Juegos Olímpicos y Paralímpicos, señala que durante el lapso que se ausentará espera tomar las cosas con más tranquilidad
y seguir aportando sus conocimientos de entrenadora en las fuerzas básicas, que es lo que más le interesa para hacer escuela.
Lenia tenía que ser operada del ojo hace un año y como estaba en puerta la justa brasileña pensó que no era el momento, por lo que esperaría primero el resultado deportivo para el que se había preparado al dejar su natal Guadalajara y ponerse a las órdenes del entrenador Hilario Ávila, de la Universidad Nacional Autónoma de México, en la capital.
Apoyo oficial
Asegura tener el apoyo de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), así como del Consejo Estatal para el Fomento Deportivo (Code) de Jalisco, por la confianza depositada para que no le falte nada, ya que, luego de su intervención quirúrgica un raspón o un brinco
puede afectarla, debido a que la última operación que le hicieron fue hace 15 años.
La campeona parapanamericana está contenta, ya que al fin le entregarán el Premio Nacional de Deportes (PND) 2016 por la medalla de oro que ganó en Río de Janeiro, el cual compartirá con Ávila, que también recibirá el galardón en la categoría de entrenador.
A la espera de su boleto de avión para estar en la cita del próximo martes en Los Pinos, en el acto que encabezará el presidente Enrique Peña Nieto, la jalisciense, de 30 años de edad, dijo que el gran día ha llegado
, luego de que la ceremonia fue pospuesta en diciembre pasado.
Ruvalcaba consideró que el reconocimiento llegó en un año muy difícil por no darse los resultados esperados
con las medallas que se tenían contemplados en el deporte paralímpico y convencional.