La violencia de pareja que padecen las mexicanas las hace perder el desarrollo que hubieran logrado en siete años, y para las que viven en Nayarit el perjuicio es hasta de 21.

De acuerdo con un estudio de ONU Mujeres, las agresiones debilitan su salud y afectan su educación y autoestima, por lo que en esas condiciones es difícil que puedan llevar una buena vida y desempeñar de forma eficiente su trabajo.

Agregó que el sector femenino padece discriminación en todas sus actividades, lo cual ocurre de manera sistemática y en todos los ámbitos.

La agencia de la ONU detalló que concentró el estudio sólo en la violencia infligida por novios o cónyuges. Resaltó que si hubiera tomado en cuenta la de las instituciones, el acoso laboral y callejero, o los ataques sexuales por hombres que no son sus parejas, es previsible que los resultados serían peores, apuntó.

En el documento Libertad y victimización: hacia un índice de desarrollo humano ajustado por la violencia contra las mujeres, el organismo pretende evidenciar que el daño causado va más allá de un mal rato. Puede significar desde la indisposición de la víctima a realizar ciertas actividades hasta la discapacidad o la muerte.

Miles de homicidios

En el periodo de 2000 a 2014 en México se registraron más de 26 mil 300 asesinatos de mujeres. En promedio, cada día ocurren siete feminicidios, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Son asesinadas más por un patrón cultural que por el crimen organizado, aseguró.

Según ese mismo organismo, la violencia más extendida es la de pareja. Cerca de la mitad de las que tienen 15 años o más han sido agredidas en su matrimonio o noviazgo. Mientras más jóvenes son, es más frecuente que se conviertan en víctimas, señaló.

Cuando son novios, las agresiones más comunes son las emocionales. Quienes viven con su victimario enfrentan casi en igual medida violencia emocional y económica, y algunas reportan también física y sexual, según información del Inegi.

La ONU explicó que aquellas que son agredidas por sus parejas ven mermada su salud, a veces por el maltrato sicológico o por los golpes. También pueden disuadirlas de mejorar su nivel educativo o tener un ingreso propio. Ellas aceptan quizá por temor a futuras represalias. Quienes tienen un empleo ven afectado su desempeño productivo, además limitan su capacidad de participar plenamente en la vida social, entre otras consecuencias.

Luego de hacer un análisis con ese enfoque, el organismo encontró que la media nacional es de siete años perdidos en su desarrollo humano. Ese progreso, apuntó, se entiende como la expansión de la libertad para actuar en su vida y escoger entre una serie de oportunidades. Esas mujeres ven limitada su autonomía para tomar decisiones y elegir lo que en verdad les conviene.

La entidad con mayor pérdida en desarrollo fue Nayarit; su disminución equivale al avance que presentarían las mujeres en 21.3 años. El estado de México y Colima también están entre las peores calificadas, con 10 años de deterioro. Pero aclaró que en realidad en todas las entidades hay altos niveles de afectación a su población femenina. En Baja California ellas pierden cinco años y es uno de los más bajos.

La violencia no es un problema de las mujeres, sino de la sociedad en su conjunto, subrayó la ONU. Además, es evitable y puede ser detenida, sostuvo.