Opinión
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En el Chopo

Tiempo de tianguis

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Ante algunos problemas de seguridad, se incremtento la vigilancia en el tianguisFoto Chelico
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el, el Chopo no necesita, aún, comunity manager; menos un planner, y quienes piensan sólo en un target dress code, no son choperos de abolengo. El Tianguis del Chopo no sólo es una plaza trendy en boga para millennials in put, también es un espacio rocanrolero con compromisos culturales; es un lugar clásico de la cultura alternativa, subterránea, no es una startup; es una propuesta nacida y mantenida durante más de 30 años por artistas de diversas expresiones creativas y sostenida por las diferentes culturas juveniles surgidas en ese mismo lapso: chavos seguidores del new wave, punk, hard, metal, progresivo, dark, posjipismo, rupestre, pop, reggae, poesía, teatro, fotografía, performance, literatura, periodismo, cine y toda la parafernalia rockera. Es la guarida/fortaleza/escaparate de grupos de rock de todas las tendencias sonoras, igual, de chavos que cada sábado salen de su barrio con estrafalarios atuendos roqueros, vestimenta indispensable de un ritual a veces heredado que sirve de carta de identificación para toparse, sin bronca, con cuates de otras colonias, pero con la misma onda, o para ligar alguna morra para ir a chelear al UTA después de pirarse del tianguis a eso de las cinco de la tarde.

Radio Chopo y propósitos para 2017

Este foro es emblemático en el historial del Chopo. Actualmente sus actividades se encuentran suspendidas por problemas de seguridad y de logística en general. Pero hay propuestas de convertirlo en un multiforo cultural donde la música –el rock– sea parte de la programación, no lo único. La banda y las bandas lo necesitan y sólo esperan el anuncio del reinicio de actividades para caerle, como ha sucedido durante al menos 20 años. También artistas visuales están atentos a ser incluidos en las próximas actividades en los espacios fundados por antiguas comisiones de cultura, como las galerías Juantxo Sillero, la de Cultura Visual, el Cinematógrafo El Topo. Asimismo, los asociados del tianguis esperan seguir contando con el apoyo de la subdelegación de Fomento y Promoción Cultural de la delegación Cuauhtémoc, que patrocinó diversos actos en el Corredor del Chopo este año. Con este tipo de soportes y trabajar alejados del culto a la personalidad, muchos esperamos que el tianguis vuelva a sus raíces, claro, sin renunciar a los avances de la época actual. Pero mañana inicia 2017. Es hora de sacudirnos las malas vibras del 16 y resaltar lo mejor de este año. Cada quien haga su resunta y rólenla en su red social preferida, vamos a destacar lo chido que nos tocó vivir y hacer planes para los siguientes 12 meses. Este espacio va a tratar de disfrutar nuevamente del sonido del disco de vinilo guardado por ahí y promete no comprar uno solo para detrimento de algunos voraces vendedores manchados de estas grabaciones, alguna vez, despreciadas por muchos de ellos. También haremos descargas en las plataformas de streaming para sentirnos actuales. Je je. La primera va a ser El oficio mío, nueva producción de Armando Rosas, que también está en formato cidí. Salú y feliz 2017.