Buenos Aires.

Un tribunal argentino resolvió este jueves investigar la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado contra un centro judío de Buenos Aires, perpetrado en 1994.

La Cámara Federal de Casación Penal, máximo tribunal penal, aceptó el pedido de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) para que un juez reconsidere la acusación que hizo Nisman el 14 de enero de 2015 contra la entonces presidenta argentina, Cristina Fernández, el canciller Héctor Timerman y otros allegados a su gobierno (2007-2015).

Los tres jueces de la Sala I decidieron por unanimidad dar entrada al recurso de casación de la DAIA y dejar sin efecto la desestimación de la denuncia que habían resuelto jueces de instancias inferiores y que un nuevo juez, mediante sorteo de rigor, continúe con el trámite de las actuaciones con la celeridad que el caso impone.

Cuatro días después de presentar su denuncia y un día antes de declarar ante el Congreso sobre la investigación, Nisman fue encontrado muerto de un disparo en la cabeza en su departamento de Buenos Aires. Hasta hoy la justicia no ha podido determinar si se suicidó o fue asesinado.

Un país que quiere llegar a la justicia debe investigar, y si hay que desechar la denuncia de Nisman lo aceptaremos, lo que no se puede es renunciar a una indagatoria, indicó Ariel Cohen Sabban, presidente de la DAIA.

La denuncia contra Cristina Fernández aumentó la brecha entre fiscales y jueces argentinos, quienes en los últimos meses se han pronunciado en distintas instancias a favor y en contra de investigar a la ex mandataria por haber encabezado, presuntamente, un plan para proteger a ex funcionarios y ex diplomáticos iraníes acusados del ataque a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) que dejó 85 muertos y cientos de heridos.

Nisman sostuvo en su acusación que el memorando de entendimiento, firmado por Argentina e Irán en 2013 con el propósito de esclarecer el atentado, era una pantalla y fue la herramienta empleada por el gobierno de Fernández para proteger a los iraníes.

La justicia declaró inconstitucional dicho acuerdo, cuestionado por resignar la jurisdicción de la justicia argentina para juzgar a los acusados del ataque contra la AMIA a una comisión internacional extrajudicial.

Irán ha negado siempre cualquier vinculación con el atentado y se ha resistido a entregar a los imputados a la justicia para ser interrogados. Otros involucrados en la denuncia de Nisman son el actual diputado Andrés Larroque y los dirigentes sociales izquierdistas Fernando Esteche y Luis D’Elía.

Los abogados de los denunciados consideraron que no debe abrirse una investigación por la falta de delito y la invalidez de algunas pruebas presentadas.

El pedido de investigar la denuncia de Nisman presentado por la DAIA se basó, entre otros elementos, en una llamada telefónica entre el entonces canciller Timerman y el dirigente judío Guillermo Borger en la que el funcionario se refería a la responsabilidad de Irán en el atentado.

Fernández de Kirchner ha sufrido en estos meses el cerco cada vez más estrecho de la justicia. Es procesada por presuntas maniobras irregulares en el mercado de dólar a futuro, que causaron un perjuicio económico al Estado, y por presunta asociación ilícita y administración fraudulenta en la concesión de obras públicas.

La ex mandataria ha atribuido las acusaciones a la presunta parcialidad de jueces que obedecen órdenes del presidente Mauricio Macri, quien la sucedió en el poder en diciembre de 2015.