Culiacán, Sin.

El Congreso del estado aprobó incrementos al Impuesto Sobre Nómina (ISN) entre 60 y 100 por ciento, crear nuevos gravámenes para servicios de hospedaje, casas de empeño y a los premios de apuestas y sorteos, como parte del Presupuesto de Egresos y Ley de Ingresos para 2017.

El dictamen aprobado señala que las empresas que tengan una nómina mensual de hasta 500 mil pesos deberán pagar ahora 2.40 por ciento de ISN, que representa un incremento de 60 por ciento. Las que tengan nóminas de 500 mil a 700 mil pesos contribuirán con 2.60 por ciento, 73 por ciento adicional, y los negocios con nóminas de 700 mil a 900 mil pesos pagarán 2.8 por ciento, lo que equivale a 86 por ciento de aumento.

Las compañías con nóminas mayores a 900 mil pesos tributarán 3.0 por ciento, lo que equivale a un incremento de cien por ciento. La tasa actual es de 1.5 por ciento y la propuesta del gobernador Mario López Valdez, avalada por el mandatario electo Quirino Ordaz, era de 3.0 por ciento de aumento generalizado, es decir, 100 por ciento más.

En el paquete fiscal se aprobó también la ampliación de los servicios que son objeto del impuesto sobre la prestación de servicios de hospedaje, con lo que se gravarán la renta de suites, villas, bungalows, marinas turísticas, casas de huéspedes, departamentos amueblados y otros inmuebles. Además, se aplicarán impuestos sobre apuestas y sorteos, para que en lugar de 6 por ciento sea 9 por ciento.

Los votos en favor fueron del PRI y sus aliados, mientras que los siete diputados del PAN, dos de Morena y uno del PRD sufragaron en contra.

En reunión previa a la votación, empresarios liderados por Luis Enrique Pun Hung, presidente de Confederación Patronal de la República Mexicana, reclamó al presidente de la Comisión de Hacienda, Aarón Rivas, la falta de sensibilidad por aprobar incrementos a los impuestos en momentos complicados para la economía nacional.

Carlos Castaños Valenzuela, coordinador de los diputados panistas, argumentó que el voto en contra del dictamen del incremento del ISN fue por considerarlo impertinente, excesivo y contrario al espíritu de competitividad.

Efrén Lerma, diputado del PRD, cuestionó que contrariamente a lo aprobado por los legisladores locales, el Instituto Mexicano para la Competitividad se ha pronunciado por la reducción del ISN, incluso por su desaparición.