El OAN, a cargo del Instituto de Astronomía de la UNAM, adquirirá cinco telescopios
Especialistas construirán un censo de objetos transneptunianos por técnica de ocultaciones
Participan también en el proyecto tres instancias internacionales de investigación
Martes 6 de diciembre de 2016, p. 2
A una altura de 2 mil 830 metros sobre el nivel del mar, en lo alto de la sierra de San Pedro Mártir, en Baja California, el Observatorio Astronómico Nacional (OAN) está en un periodo de crecimiento, con el fin de que a los cuatro telescopios con que cuenta se sumen cinco para fortalecer la investigación científica y tecnológica de frontera a finales de 2017.
Ubicado en uno de los cuatro mejores sitios del mundo para la observación especializada –el OAN, que está a cargo del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)–, se instalarán entre finales de este año y el otoño del siguiente cinco artefactos nuevos, indicó Mauricio Reyes, jefe del observatorio.
La UNAM informó que tres de los nuevos aparatos corresponden al proyecto internacional Transneptunian Automated Occultation Survey II (TAOS II). Cada uno medirá 1.3 metros de diámetro en su espejo primario, y trabajarán de manera coordinada.
Reyes, también responsable del TAOS II en México, afirmó que el edificio que albergará el primer telescopio se está construyendo, y confió en que esté listo a fin de año. Se calcula que los otros dos se concluyan en verano de 2017.
En este proyecto internacional participan de manera conjunta los institutos de Astrofísica, el de Astronomía y Astrofísica de la Academia Sínica de Taiwán –donde se instaló el TAOS I– y el Centro para la Astrofísica Harvard-Smithsoniano.
Con los tres nuevos instrumentos de observación se hará un censo de los objetos transneptunianos pequeños, por la técnica de ocultaciones, ya que generan una especie de pequeños eclipses de estrellas, las cuales indican que por enfrente de ellas pasó un objeto de la periferia del sistema solar. Ese estudio permitirá saber cuáles eran las condiciones cuando se formó el sistema solar.
Imágenes más nítidas
Al entender cuántas son, dónde están y cómo se mueven, los científicos podrán inferir qué fue lo que pasó y dio lugar para la formación del sistema actual.
La parte más novedosa del proyecto, explicó el investigador, son las cámaras de alta precisión que utilizarán para supervisar una porción grande del cielo, pues se podrá seguir el brillo de 10 mil estrellas simultáneamente y se tomarán imágenes cada veinteavo de segundo. Además, el uso de estos detectores podría tener aplicaciones en otras áreas.
El jefe del OAN de San Pedro Mártir resaltó la importancia de esta infraestructura, pues salvo el telescopio Bootes-5, inaugurado en noviembre de 2015, esta institución de servicio nacional no tenía un telescopio nuevo desde hace 35 años.
Al mismo tiempo, en el OAN ya se construyen el recinto y el telescopio robótico Coatli, de 50 centímetros de diámetro, y avanza la cimentación de Ddoti, que constará de seis instrumentos de 28 centímetros que operarán en una base común.
Alan Watson, investigador el Instituto de Astronomía y responsable de los dos últimos proyectos, señaló que aunque el primero es un instrumento pequeño, contará con una cámara con estabilización que dará imágenes de nitidez hasta tres veces mayores que algunos de los que actualmente tienen, y brindará detalles finos de estrellas y galaxias.
Mientras, Ddoti es una cámara que permitirá ver hasta un ángulo de 10 grados en el cielo y se utilizará para localizar objetos que han sido detectados en rayos gamma por satélites de la NASA o en ondas gravitacionales por los observatorios nuevos. Se espera que este instrumento inicie operaciones en verano de 2017.