La Cámara de Diputados tiene detenidas cinco de las principales leyes en materia de protección y defensa de derechos humanos, que le remitió el Senado, entre ellas las nuevas legislaciones para el combate a la tortura y a la trata de personas, modificaciones en atención a víctimas, las garantías de juicios justos a extranjeros en caso de expulsión y el contexto jurídico que defina los estados de excepción en el país, éstas dos últimas pendientes desde hace cuatro años.

Incluso, el artículo 33 constitucional es el único de los 11 de la Carta Magna que se modificaron en junio de 2011 –dentro de la reforma en materia de derechos humanos– que, a seis años de ello, no ha entrado en vigor, porque no cuenta con ley reglamentaria.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Angélica de la Peña, pidió a los diputados que hagan un esfuerzo y en los días que restan al periodo de sesiones discutan las cinco minutas, ya que se trata de leyes que son particularmente sensibles para la ciudadanía, que no pueden seguir congeladas más tiempo.

Esperaría a que haya voluntad política del gobierno federal, a fin de que su partido, el Revolucionario Institucional (PRI), que además preside las comisiones en la materia, participe de forma preponderante.

La perredista detalló que tres de las minutas fueron remitidas a la Cámara de Diputados de la anterior legislatura, que concluyó sin dictaminar dos ellas y la otra, la que se refiere a la Ley contra la Trata de Personas, la regresaron al Senado. “Es cierto que quienes están llegando, apenas conocen la materia, pero estamos dispuestos a trabajar con ellos.

Insistió en que es urgente que la Cámara de Diputados destrabe el proceso en torno a esa agenda fundamental. Explicó que en el Senado se hizo un trabajo serio, conjuntamente con organizaciones sociales, colectivos de víctimas, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otros organismos internacionales.

Es urgente, recalcó, que los diputados discutan y voten las leyes reglamentarias de los artículos 29 y 33 constitucionales, producto de la reforma a la Carta Magna en materia de derechos humanos. La senadora De la Peña, explicó que al iniciar la legislatura en el Senado, en diciembre de 2013, se dieron a la tarea de crear las dos legislaciones secundarias y las turnaron a la colegisladora.