Nueva York.

Un huracán de opiniones, reacciones y expresiones de comentaristas, expertos, medios de comunicación y hasta comediantes intentó comprender qué sucedió, y apenas empieza un largo debate sobre qué, quién y cómo fue que Donald Trump –el magnate de bienes raíces, estrella de reality shows– ahora está a punto de ser el presidente número 45 de Estados Unidos.

Aquí presentamos algunos ejemplos iniciales de un debate, si así puede llamarse, que apenas empieza bajo la sombra del presidente electo.

“Una tragedia americana”, fue el título del editorial de The New Yorker, del director del diario, David Remnick, quien escribió que la elección de Trump es nada menos que una tragedia para la república estadunidense, para la Constitución, y un triunfo de las fuerzas, aquí en casa y en el extranjero, del nativismo, el autoritarismo, la misoginia y el racismo.

Agregó que se trata de un evento enfermizo y “es imposible no reaccionar a este momento… con repulsión y ansiedad profunda”. Concluyó que lo único que se puede hacer, lo único que se tiene que hacer es combatir el autoritarismo y rechazar la desesperanza.

Un evento cataclísmico

El periodista y coeditor de Bloomberg Politics, Mark Halperin, dijo, al ver los resultados de anoche, que fuera de la Guerra Civil, la Segunda Guerra Mundial e incluso el 11-S, esto podría ser el evento más cataclísmico que el país ha visto jamás.

The New York Times opinó en su editorial: “No podemos sumirnos en el temor o abatimiento. Hay demasiado que se necesita hacer. Hay un planeta que salvar… del cambio climático… Hay millones de inmigrantes que escudar de un régimen de seguridad interna de Trump”, y también proveer servicios a ciudadanos, entre ellos salud, si Trump reduce o anula algunos de estos programas.

The Washington Post escribió en su editorial que muchos estadunidenses se despertaron el miércoles preguntando si eran bienvenidos en su propio país. Esta sensación de encadenamiento era diferente de la sacudida normal cuando nuestro partido o candidato pierde una elección, por la división e intolerancia promovida por el ganador. Agregó que ahora corresponde a cada ciudadano buscar cómo promover la inclusión, “extender una mano a un vecino que se ve diferente, habla diferente… y decir si esta tierra es nuestra tierra”.

The Guardian opinó que “lo impensable sólo es impensable hasta que ocurre. Entonces, como la caída de Roma, parece ser históricamente inevitable. Así es con el sismo político global que es la elección de Donald Trump… Los estadunidenses han hecho algo muy peligroso esta semana, porque lo hicieron; todos enfrentamos tiempos oscuros, inciertos y temerosos”.

Stephen Colbert, el brillante comediante, en un programa especial en vivo durante las elecciones, empezó con sus casi siempre atinadas bromas suponiendo que al final Trump sería derrotado, pero al transcurrir la noche fue cada vez más difícil buscar de qué reír. Al final, con el resultado anunciado, sólo pudo preguntar: ¿Cómo se volvió tan venenosa nuestra vida política? Tal vez sufrimos de una sobredosis. Tomamos demasiado veneno.