El Gobierno de la Ciudad de México cuenta con una nueva política de transparencia y lucha contra la corrupción de manera efectiva, con sanciones cada vez más severas y la reducción de trámites burocráticos, afirmó el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.

Durante su gira de trabajo por Miami, Florida, destacó que la Contraloría General de la capital aumentó 60 por ciento las sanciones a servidores públicos que han incurrido en faltas a la ley.

Mientras para combatir la corrupción se han reducido los trámites burocráticos, al pasar de 5 mil a 2 mil 300, lo cual también ha impactado en una disminución en los tiempos de atención, pues básicamente tienen que atenderse en 20 días.

En una charla que sostuvo con el vicepresidente ejecutivo de The Aspen Institute, Elliot Gerson, en el contexto del CityLab 2016, organizado por la revista The Atlantic y Bloomberg Philanthropies, refirió que la administración capitalina cuenta con 300 mil trabajadores.

Por ello es necesario tener mayor efectividad en el control de las tareas, con servidores públicos probados y contralores ciudadanos que participan en los asuntos públicos locales, en una actividad de evaluación de proyectos y contratos públicos.

Los gobiernos locales, al ser el primer contacto con la ciudadanía, deben transparentar todas sus acciones para poner el ejemplo a los gobiernos nacionales y la gente conozca dónde se está implementando cada peso que ingresa, afirmó.

“Por eso –dijo–, subir los contratos a Internet para conocimiento de la ciudadanía es una tarea muy importante y somos la primera ciudad en el mundo en implementar todas las fases del Estándar de Contrataciones Abiertas, lo cual puede generalizarse en otras entidades del país.

De manera paralela, se implementó una legislación donde todos los servidores públicos de la administración local tienen la encomienda de transparentar su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, destacó.