En julio pasado el gobierno mexicano debió entregar un informe a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre avances en el respeto a los derechos de las mujeres y la eliminación de la violencia contra ellas, pero hasta ahora no lo ha hecho.

‘‘Tenemos un retraso de cuatro semanas. Ello está permitido; se puede pedir una prórroga y no estamos en falta’’, afirmó en entrevista Lorena Cruz Sánchez, presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres). Esa instancia, junto con la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), es la encargada de coordinar el documento y presentarlo.

La peor manifestación del problema es el feminicidio

‘‘Vivimos una situación extrema de violencia de género. La peor manifestación de esto es el feminicidio, otra la desaparición’’, alertó en entrevista por separado Gloria Ramírez, especialista en derechos humanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El informe es sobre el cumplimiento de las 132 recomendaciones que emitió la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (Cedaw, por sus siglas en inglés) en su más reciente evaluación sobre el país.

La Cedaw ‘‘es como la carta magna de los derechos de las mujeres. Para México es obligatorio acatarla’’, explicó Ramírez, quien coordina la Cátedra Unesco de la UNAM. La comisión vigila el cumplimiento de las recomendaciones y elabora un ‘‘informe sombra’’. En él se señala ‘‘lo que el gobierno no dice, menciona cuáles son los obstáculos y cómo se pueden sumar esfuerzos’’, abundó. Sin embargo, no puede presentarlo hasta que el gobierno entregue el suyo.

Cada cuatro años la convención le pide cuentas al país, y hasta ahora México ha presentado ocho informes. En la más reciente revisión ‘‘emitió tantas recomendaciones’’ que pidió responder al menos dos: desapariciones y aborto legal. En ambos casos la situación ha empeorado, sostuvo Gloria Ramírez.

La Cedaw pidió desarrollar un registro oficial y sistemático de las desapariciones, a fin de observar la magnitud del fenómeno, ‘‘lo cual no ha ocurrido. Es prácticamente imposible saber el número, pues las cifras del gobierno se contradicen y no hay datos completos’’.

Solicitó finalmente eliminar los obstáculos que enfrentan las mujeres que desean interrumpir su embarazo en forma legal, así como ampliar el acceso a éste. ‘‘Más claro ni el agua, y en lugar de eso están legislando en contra’’ en varios estados. ‘‘No es un informe fácil y queremos presentar los avances y también los retos’’, indicó Lorena Cruz. Uno, dijo, ‘‘es la situación de los abortos’’.