Culiacán, Sin.

Un comando del cártel de Sinaloa perpetró una emboscada contra elementos del Ejército Mexicano para rescatar a un presunto sicario que resultó herido y capturado durante un enfrentamiento ocurrido en el poblado de Bacacoragua, municipio sinaloense de Badiraguato, y que los militares trasladaban a Culiacán, informó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

La institución castrense confirmó que el ataque sufrido en la entrada norte de Culiacán dejó un saldo de cinco militares muertos y 11 heridos (cuatro de ellos de gravedad), entre los que se encuentra el conductor de una ambulancia de la Cruz Roja en la que se transportaba al sicario lesionado. El paramédico está fuera de peligro.

El general Alfonso Duarte Mújica, comandante de la tercera Región Militar, dijo en conferencia de prensa que muy probablemente fueron los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán Loera –Alfredo e Iván Archivaldo Guzmán Salazar, presuntos cabecillas del cártel de Sinaloa– los que ordenaron la emboscada al convoy para liberar a Julio Óscar Ortiz Vega, El Kevin, integrante de una célula del grupo delictivo.

Los militares lesionados fueron llevados a los hospitales del Issste y Civil en Culiacán, y vía aérea al Hospital Militar de Mazatlán, donde se mantiene un fuerte operativo de seguridad. Al menos cuatro de los heridos están en condiciones graves.

El ataque fue alrededor de las 3:30 horas de ayer frente al fraccionamiento Espacios Barcelona, por la carretera México 15. Uno de los vehículos militares se incendió y en el lugar quedaron cuatro soldados muertos; otro de los elementos castrenses murió cuando recibía atención médica.

La Sedena explicó que “la madrugada de este viernes personal militar en Bacacoragua fue objeto de una agresión armada y en respuesta resultó herido un individuo, huyendo el resto de los agresores.

En estos hechos, el personal militar, conforme a los principios aplicables al uso de la fuerza, procedió a auxiliar al herido, trasladándolo hasta el poblado de Badiraguato, donde los servicios médicos no pudieron proporcionar la ayuda requerida; la Cruz Roja Mexicana de este lugar apoyó con una ambulancia para trasladarlo a Culiacán, indicó la dependencia.

El personal militar que integraba la escolta del lesionado, añadió, al ingresar a Culiacán fue agredido con armas de gran volumen y potencia de fuego por un grupo de la delincuencia organizada que se estableció en la entrada de la ciudad, esperando a los militares para atacarlos.

Los agresores, que iban en al menos ocho camionetas, dispararon armas calibre .50 (capaces de perforar blindajes y derribar un helicóptero), granadas de fragmentación y fusiles AR-15 y AK-47.

Desafortunadamente estos grupos actúan de forma premeditada, cobarde, alevosa, llevando a cabo la acción con armas de fuego, con granadas, dijo Duarte Mújica.

Toda la fuerza del Estado, agregó, se va a poner en marcha para dar con los responsables y castigarlos. A esta postura se unió el gobernador Mario López Valdez, quien estuvo presente en la conferencia de prensa, realizada en la novena Zona Militar.

En la zona serrana de Badiraguato, recordó Duarte Mújica, “precisamente se encuentra el pleito entre El Guano (Aureliano Guzmán Loera, hermano de El Chapo) y las fuerzas de El Mochomito (Alfredo Beltrán, hijo de Afredo Beltrán Leyva, El Mochomo), y es donde se generan conflictos en comunidades como Huixiopa, Bacacoragua y aledañas, para tener el control de los medios de producción de enervantes”.

Hasta el momento se desconoce la identidad de los soldados heridos y muertos, así como el saldo que tuvo el enfrentamiento en Bacacoragua, donde los militares detuvieron a quien horas después fue rescatado por el comando armado.

Tras los hechos ocurridos ayer, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que a través de su delegación en Sinaloa inició una carpeta de investigación contra quien resulte responsable del ataque realizado a efectivos militares en Culiacán.

La dependencia que encabeza Arely Gómez González señaló que la indagatoria se abrió por los delitos de homicidio, daños, lesiones y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.

Saldo sangriento en la zona

En apenas una semana, 41 personas han sido asesinadas a balazos en Sinaloa, la mayoría en los municipios de Culiacán, Mazatlán y Escuinapa.

Sólo en Mazatlán, el domingo pasado fueron ultimadas seis personas, entre ellas una mujer, cuyos cadáveres los arrojaron en la entrada de una clínica privada.

En la zona serrana de Escuinapa cinco personas fueron abatidas a tiros.

La violencia se ha recrudecido en Sinaloa luego de la recaptura de El Chapo, pero también después de que fue atacada la vivienda de Consuelo Loera, madre de Joaquín Guzmán, en la comunidad de La Tuna, en junio de este año.

Al menos 200 familias huyeron para refugiarse de la violencia en la zona y apenas la semana pasada un comando del cártel de Sinaloa tomó la comunidad de Huixiopa, bastión de los Beltrán Leyva en esa región, donde se desconoce el número de muertos y heridos, y han sido suspendidas las clases prácticamente todo este ciclo escolar.

Unas 7 mil 400 personas han sido asesinadas en lo que va del gobierno de Mario López Valdez, que culmina en diciembre. En los seis años del anterior mandato, el de Jesús Aguilar Padilla, sumaron cerca de 6 mil 500 muertos.