Romualdo Chávez Muñoz fue levantado el 22 de diciembre de 2014 por personas armadas. Se presume que eran policías municipales. Lo sacaron a la fuerza, por la madrugada, de un hotel de Ciudad Cuauhtémoc, Chihuahua. Es ingeniero civil, contratista de obras para Frisco.

Su familia reside en Hidalgo. La denuncia fue interpuesta, pero poco pueden hacer, a miles de kilómetros de distancia, para dar seguimiento a la posible acción de la fiscalía estatal, por el gasto que representa el viaje y, sobre todo, porque hay temor de enfrentarse contra la policía local, presunta responsable de esa desaparición.

Seis meses antes de la agresión, Romualdo tuvo un altercado con el policía municipal de Ciudad Cuauh- témoc Juan Fernando Mascorro Cardona, quien lo amenazó de muerte y, al parecer, concretó su venganza, señalan los familiares de la víctima.

“La procuraduría sólo dice que sí se lo llevaron, que supuestamente un día después de que un primo de nosotros presentó la denuncia allá ya lo habían ejecutado, pero la persona que creemos que lo hizo ya renunció a la policía municipal. Afirman que ya no lo localizan, pero hasta ahí. No hay ninguna investigación, ningún dato más.

Lo que queremos es que nos regresen a mi hermano. En las condiciones que esté, pero que lo regresen. No queremos nada en contra de las personas que se lo llevaron, pero que lo regresen, relata una hermana de Romualdo.

“Mi mamá –agrega– está enferma. Romualdo era nuestro sostén, nuestro segundo padre, y de pronto desaparece. Estamos enojados porque sabemos el nombre y apellido de quien lo hizo, de sus cómplices, pero la autoridad no hace nada.

Después de ello (los secuestradores) fueron a un cajero. Había video, pero mañosamente la autoridad dejó pasar un año, tiempo en el que el banco pudo haberles dado esas imágenes para reforzar la investigación, agrega otro familiar.

“La familia está afectada, es desgaste para todos. Somos seis hermanos y todos andamos apoyando la búsqueda. Unos trabajando para que los otros se puedan mover e ir a diferentes lados.

Nosotros, por nuestros medios, hemos indagado. Hay videos del hotel del que se lo llevaron. Se ve quién lo hace, cómo se lo llevan, pero nada. La autoridad no investiga nada. No pasa nada. Las imágenes están en poder de la fiscalía de la zona occidente.