El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, acusó al obispo de Cuernavaca, Ramón Castro, de convocar a una rebelión contra la ley que permite el matrimonio igualitario en esta entidad.

La Secretaría de Gobernación –comentó– ha dicho que el obispo debe atenerse al estado de derecho, en particular porque esas uniones son legales y, por tanto, “no puede convocar a una rebelión contra la Constitución del estado de Morelos.

Es evidente la conspiración política que encabeza el obispo de Cuernavaca que, con el argumento de la inseguridad, esconde su verdadera agenda y la negativa a que un gobierno progresista siga protegiendo los derechos humanos, aseveró Ramírez.

Señaló al rector de la Universidad Autónoma de Morelos (UAEM), Alejandro Vera Jiménez, de alentar un ataque político como estrategia para evadir su responsabilidad ante la revisión de las finanzas de la institución educativa.

El gobernador Ramírez ofreció ayer una conferencia de prensa en la Ciudad de México para denunciar la existencia de una confabulación de fuerzas conservadoras contra un gobierno progresista que cumple con la agenda y respeta los derechos humanos, dijo.

En ese ataque mencionó como protagonistas al obispo Castro, al rector Vera y a organizaciones como la de transportistas.

En semanas recientes, varios grupos han multiplicado acciones contra el gobernador; el rector de la UAEM pide la destitución del mandatario estatal y someterlo a juicio político.

Pasivos, desvíos y faltas

Graco Ramírez dijo que respeta el derecho de manifestación. Sin embargo, subrayó, el rector debe resolver el tema del presupuesto porque tiene pasivos, desvíos y faltas por 450 millones de pesos; en octubre, la universidad no tendrá capacidad de pago para profesores y empleados.

Acuso al obispo de realizar un ataque en respuesta a la aprobación de la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo; a la universidad, de pretender desviar la atención de las auditorías y los faltantes en la administración de la actual rector, mientras que de los transportistas mencionó su oposición a una transformación para limpiar la corrupción en el sector público.

La semana pasada, el subsecretario de población, migración y asuntos religiosos de Gobernación, Humberto Roque Villanueva, dijo que se comunicó con el obispo y le dijo que estaba cerca de cometer una violación a la ley, y el prelado respondió que sólo fue invitado a una reunión (de los opositores al gobernador), de la que sólo fue escucha.

El funcionario federal dijo que el caso Morelos se analiza y se sigue de cerca, aunque dejó entrever que los jerarcas estarían ejerciendo su derecho a la libre expresión al externar opiniones sobre el matrimonio igualitario.

En cuanto a las fosas halladas en Tetelcingo, dijo que no son clandestinas, sino comunes y, en su momento, las instancias federales, así como la Comisión Nacional de Derechos Humanos, además de autoridades locales, están por presentar conclusiones de los exámenes a los cadáveres.

Insisto, no se pueden utilizar estos argumentos como ataque político simplemente para poner una agenda y desviar lo que tiene que responder el rector, dónde está el dinero de la universidad, dijo.