Con un aplauso y al ritmo del corrido de Chihuahua recibieron ayer por la tarde a Misael Chino Rodríguez, medallista de boxeo en los Juegos Olímpicos Río 2016, en la comida que le organizaron para festejar su logro.

Como un niño con juguete nuevo se mostró el púgil, quien a los 22 años cumplió uno de sus más anhelados sueños: subir al podio olímpico, aunque no dejó de lamentar, en la plática con los medios de comunicación, que hubiera sido mejor regresar con el oro.

Con semblante serio, que mudaba a una amplia sonrisa cuando le mencionaban el bronce ganado en la división de los 75 kilogramos, Misael había comentado por la mañana –cuando regresó de Brasil– que tiene ofertas para debutar en el boxeo profesional desde antes de los juegos, pero su finalidad era primero respirar el aroma del Olimpo.

Ya cumplí un sueño que no esperaba lograr tan pronto. Estoy bien chico, por lo que puedo administrar mi tiempo. No sé si irme al boxeo profesional o seguir aquí (en el amateur). Apenas tengo dos años y medio. Lo que sí sé es que donde vaya seguiré poniendo todo el empeño que he puesto hasta ahora.

Ataviado con sus pants de competencia, el púgil recordó que su siguiente meta es calzarse un cinturón de campeonato mundial: no lo niego, pero tampoco estoy diciendo que ya me voy ni que me quedo. Sólo que lo voy a pensar muy bien para tomar la mejor decisión, comentó con una leve sonrisa.

Acompañado de su madre, Aurelia Olivas, a quien le colgó la medalla para que los fotógrafos se dieran vuelo con sus tomas, el de Chihuahua comentó que sin el apoyo de su familia nunca hubiera logrado lo que alcanzó en Río y antes había dejado en claro que no se mete en problemas con nadie, por lo que el abrazo de Alfredo Castillo, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), cuando ganó el bronce, lo tomo como de un aficionado al boxeo.

El boxeador Misael Chino Rodríguez festejó ayer con una comida haber ganado la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Río de JaneiroFoto Jorge Sepúlveda

En su oportunidad, el mánager Francisco Bonilla indicó que es una satisfacción muy grande estar en el boxeo olímpico, porque cuando se tiene acceso a una medalla es como la culminación de todo el trabajo hecho a lo largo del ciclo.

Al referirse al Chino Rodríguez, fue un poco atrás para hacer referencia que desde su convocatoria tuvieron la confianza de que algo importante podía lograr, de ahí que le recomendó continuar en el olimpismo, porque eso lo haría madurar física y mentalmente, pero esa es una cuestión que él debe pensar y valorar.

El titular de la Federación Mexicana de la especialidad, Ricardo Contreras, comentó que Misael no sólo regresó al pugilismo nacional a la senda de las medallas, sino que también recuperó la dignidad para esta actividad.

Aprovechó el momento para pedir al presidente Enrique Peña Nieto que trate de colocar en la Conade a una persona que no sólo sepa de deportes en general, sino que entienda que cuando se hace mal uso del poder, se tiene que pagar.