Si usted, lector, pudiera ser invisible, ¿qué haría? Este no es un asunto nuevo. Durante toda la existencia de la humanidad nos hemos propuesto llegar a desaparecer a nuestro antojo. Pero, ¿para qué?

Según estudios, como en el de este libro, hay tres cosas esenciales que haríamos en caso de lograrlo, y tienen que ver con el poder, la riqueza y el sexo. Todo lo demás sería secundario o derivado de aquéllos.

Sin duda, gran parte de la mitología en todas las culturas ha indagado en este asunto. Ha sido una interesante búsqueda como posibilidad teórica y como tecnología práctica en el mundo real. La ciencia ficción, las ciencias ocultas, y la ciencia seria, descartan que esta búsqueda sea una peculiaridad de nuestra época, pues en las viejas historias, en los mitos y leyendas, incluidos los cuentos de hadas, la invisibilidad no era ni tan difícil de conseguir ni tan aceptada como logro importante. El asunto central era que se lograba y se usaba para tal o cual fin.

Este libro no es una novela que trate sobre la invisibilidad, tampoco un largo ensayo o estudio académico. Compila sucesos históricos-científicos de los intentos, algunas veces muy risibles, por lograr la invisibilidad.

Del lado de la ciencia, por ejemplo, el autor dice que es esa disciplina la que postula que la invisibilidad es una cuestión de óptica. Y el color de un objeto es resultado de la absorción de la luz, que elimina ciertas longitudes de onda de la luz que es reflejada hacia nuestros ojos. Cuando la luz del sol cae sobre una manzana, los colores azules y los verdes son absorbidos y los rojos son reflejados, sobre todo en las de color rosáceo.

Esto a la mitología y a la literatura no sirve de mucho, pues los ocultistas y magos han creado sus propias recetas intrincadas para lograr la invisibilidad sin tanto rollo.

Quizá donde ha sido más útil, y donde se han gastado muchos millones de monedas para lograr la desaparición deliberada y controlada, es en los asuntos militares. Durante la Primera Gran Guerra se le dio mucha importancia, era indispensable que los convoyes militares, el personal y la artillería pasaran inadvertidos desde las alturas. El ejército francés fue el primero en desarrollar estas ideas, y por eso camuflaje es una palabra derivada de ese idioma, camoufler, que significa disfrazar.

La imaginación y el ingenio generan estas posibilidades. La ciencia, en estos casos, será la encargada de explicarlo, refutarlo o validarlo.

Título: El peligroso encanto de lo invisible

Autor: Philip Ball

Editorial: Turner,

colección Noema

Páginas: 385

Venganza entre pandillas

No dejar de leer es ir al encuentro de lo que va a suceder. Sin prisas. Y en este libro es indispensable tomar la recomendación sin desviarse demasiado.

Hay cosas interesantes en esta novela, que es necesario enumerar para no errar en la lectura o hacer una mala interpretación antes de terminarla. Una son los personajes. El autor va a describirnos en todo momento la situación de los aquí involucrados desde un punto de vista que, al arranque de la lectura, pareciera que se vincula a lo racial, con estereotipos de que los latinos en Estados Unidos, los chicanos, los negros y los migrantes son la parte más podrida de ese país.

El motor de este libro son los disturbios en las calles de Los Ángeles en 1992, del 29 de abril al 4 de mayo. Aquellas manifestaciones violentas que sucedieron luego de que las autoridades gringas absolvieron a tres policías blancos acusados de agredir y matar a Rodney King, un hombre negro. Las refriegas para exigir justicia duraron varios días. Abundan las noticias al respecto.

Esta novela no se mete en esos asuntos. Les da origen, pero el autor va por otro lado. A él le interesan los daños colaterales, esta frase usada cuando la precariedad de las respuestas a los conflictos rebasan toda explicación, y que cuando es bien empleada esta receta da resultados positivos, o por lo menos distrae y otorga cierta esperanza en quien la escucha.

De tal manera que el autor va a meterse en las entrañas de esos otros conflictos surgidos de los mencionados hasta la confusión en los noticiarios. Se trata, pues, de las venganzas entre pandillas, de esos barrios donde habitan en su mayoría migrantes indocumentados, mexico-estadunidenses, mojados, braceros o cualquier otro término que se les ocurra. Hay muchas balas y todo eso que se supone que hacen los integrantes de la clica.

Son 17 relatos de pandilleros. Todos bien hilados y contados en primera persona. Parecerá exagerada la forma en la que los narra, los apodos de cada uno, el slang de barrios bajos, toda la droga que se vende y consume, la organización de los asesinatos, las venganzas, etcétera. Pero si nos ponemos fríos e indagamos un poco por nuestra cuenta, podremos confirmarlo al ver algunos documentales, por ejemplo, de la Mafia Mexicana, una de las pandillas más grandes y temerarias que hubo o hay en Estados Unidos, comprobaremos que existen, además de la forma en que están organizados y su sentido de pertenencia a esos grupos. Demasiada lealtad entre ellos.

Esta es una especie de recuento de declaraciones de pandilleros que perpetraron venganzas durante y a la par de aquellas manifestaciones. Cuestiones de honor, las llaman, y no actos morales, aquí eso queda sepultado por el impulso de atravesar al otro con balas o a puñaladas. Pocas reflexiones y divagaciones. Eso sí, mucha velocidad en las frases, típico de literatura gringa. En todos esos casos hubo muertes, injusticias y tropelías. Porque en una riña, si a un tipo le cae mal otro por lo que sea, se aprovecha del caos para hacerle algo, de forma que aquí entran también rollos raciales, como los ataques de negros a coreanos o bien como distracción para atraer a los servicios de emergencia y así cometer un crimen en otro lugar, y es obvio que las bandas y los dueños de los establecimientos afectados hicieron esto. Que los daños los paguen las agencias de seguros. Negocio redondo, unas monedas a cambio a nadie le vienen mal.

De manera que, como dice el autor, hay una América oculta detrás de la que les enseñamos al mundo, y sólo la ha visto un pequeño grupo de personas. Y aquí está escrita con tremendo ritmo. Una vez superada la cuestión racial que notaremos al inicio, el alto voltaje narrativo envolverá la totalidad de la novela.

Título: Todos involucrados

Autor: Ryan Gattis

Editorial: Seix Barral

Páginas: 494

Sufrir la orfandad

El tema de esta novela es sobre el abuso que sufre una niña de menos de 10 años, hija de padres alcohólicos que la abandonaron. Vive, por tanto, con sus abuelos. Gran infierno. Casi a diario me atormentan y me muelen a palos. Comparada con la casa de abuelita, en una prisión de verdad estaría en unas condiciones tranquilas, dice la pequeña. Además de que su abuelo la violaba. Este libro es sobre violencia y abuso sexual infantil. Tema poco tratado en la literatura. Es notoria la forma en la que la autora se contuvo mucho al narrar los detalles, pero con lo poco que se logra atisbar es suficiente para sentir el terror físico y sicológico de la pequeña Saara. Su imaginación la salvará.

Título: Tu amor es infinito

Autor: Maria Peura

Editorial: Sexto Piso

Páginas: 205

Texto: José Rivera Guadarrama

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