El Frente Auténtico del Trabajo (FAT) informó que pepenadores de Silao, Guanajuato, pertenecientes a la Unión de Trabajadores de Desechos Sólidos Industrializables, perdieron su fuente de empleo porque el municipio concesionó por 15 años el confinamiento de basura a la empresa Setasa-Proactiva.

Indicó que estos trabajadores están desesperados, pues el ayuntamiento sólo les dio una pequeña despensa y les informó que ya no laborarían más en los rellenos.

Eladio Abundiz, del FAT, explicó que lo que sucede en Silao es parte de una política que se está generalizando en el país, con graves impactos en los pepenadores, pues los municipios están concesionando a particulares la recolección y confinamiento de la basura en los rellenos, los cuales no permiten la pepena.

En ese municipio de Guanajuato 30 familias han perdido su ingreso. Aunque se trata de un trabajo informal, precario y de riesgo sanitario, no tienen otra forma de sobrevivir, advirtió.

Además, esta empresa tiene por política no reciclar. Diariamente entierra en promedio de 100 toneladas de material recicable lo que viola la norma oficial mexicana 161 sobre residuos sólidos urbanos, sostuvo el FAT. Agregó que el relleno sanitario opera en condiciones inadecuadas, pues sus lagunas de oxidación para el tratamiento de lixiviados no funcionan y pueden contaminar campos agrícolas cercanos.

Los pepenadores cumplen con una función socioambiental importante. Su trabajo de recuperación es vital para cerrar el ciclo de residuos, sostuvo el FAT, que pidió revisar el convenio con Setasa-Proactiva y lo cancele si no cumple las normas ambientales.