Río de Janeiro.

La polaca Anita Wlodarczyk inició el día con estruendo al pulverizar la mejor distancia de todos los tiempos en la prueba del lanzamiento de martillo, dejando el nuevo récord del mundo en 82.29 metros, mientras la corredora Ruth Jebet, de Bahrein, rozó la proeza en los 3 mil metros con obstáculos, pero aflojó al final y quedó a menos de un segundo de la plusmarca.

Wlodarczyk validó su condición de favorita tras 28 victorias consecutivas y dio una demostración de fuerza en Río. Su histórico lanzamiento fue el tercero de su serie e hizo añicos la distancia anterior, de 81.08, que ostentaba ella misma desde 2015.

La china Wenxiu Zhang acabó segunda, con 76.75 metros, y la británica Sophie Hitchon ocupó el tercer sitio, con 74.54.

La polaca, quien ganó la presea de plata en Londres 2012, dijo que los atletas sufrieron por el calor dentro del estadio Olímpico.

Eran condiciones en extremo duras y hacía muchísimo calor, señaló. Tuve que echarme agua fría en la cabeza. Este resultado es fantástico en estas condiciones. Después del récord mundial sentí una explosión de alegría, pero ahora estoy sumamente agotada. Este es el mejor día de mi vida y seguiré luchando para mejorar mi resultado.

En el atletismo la etiope Almaz Ayana también registró la mejor marca de la historia en los 10 mil metros el viernes y el sudafricano Wayde van Niekerk hizo lo propio en los 400.

Por su parte, Jebet –originaria de Kenia, pero con pasaporte de Bahrein– dominó la carrera de obstáculos al terminarla en 8 minutos 59.75 segundos. Sólo su relajamiento final le impidió rebasar la mejor marca de 8.58.81, que desde 2008 pertenece a la rusa Gulnara Galkina.

La estadunidense Emma Coburn rebasó en la última vuelta a Beatrice Chepkoech, de Kenia, para ganar la medalla de bronce, mientras Hyvin Kiyen Jepkemoi, también keniana, se colgó la plata. Nadie me dijo sobre el récord. Yo sólo quería el oro, indicó Jebet.