La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) lleva a cabo trabajos de vigilancia en 58 de los 95 zoológicos –como parte del Programa Nacional de Inspección– en que encontró condiciones de maltrato a ejemplares. La dependencia informó que éstos tienen que demostrar la procedencia de unos 4 mil animales.

Otras irregularidades detectadas son la carencia de planes de manejo y registro de especies ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

Además, apuntó, ausencia de sistemas de marcaje de ejemplares, incumplimiento de lo estipulado en registros y falta de informes anuales y de contingencias, principalmente.

En lo que va del año la Profepa ha decomisado 133 animales por faltas sobre trato digno y respetuoso, de los cuales siete eran del zoológico Centenario, anexo Mulsay y seis del parque zoológico y botánico La Reina. Ambos se encuentran en el estado de Yucatán.

Respecto del zoológico de Chapultepec, indicó que de los 197 ejemplares decomisados durante la inspección, las autoridades del lugar han acreditado a la fecha la procedencia de 73.

También se inició un procedimiento para que presente en los términos de ley la documentación requerida y subsane dichas irregularidades, correspondientes a 124 animales.

Asimismo, se le ordenó a ese zoológico la aplicación de un programa diario de higiene, limpieza y mantenimiento en las áreas de patología, necropsia, hospital, laboratorio, almacén y preparación de alimentos.

Las autoridades del zoológico de Chapultepec deberán poner en marcha un programa para tener control de roedores y demás fauna nociva en las áreas de almacén y preparación de alimentos.

De igual forma, colocar protecciones en las lámparas y cumplir medidas correctivas y de urgente aplicación, como el retiro de medicamentos caducos del área de farmacia del hospital veterinario.

Asimismo, instalar tapetes sanitarios en los accesos a las siguientes áreas del hospital: necropsias y preparación de alimentos. Por último, instalar barreras físicas, por ejemplo mosquiteros o similares, en ventanas y puertas de acceso a las áreas de patología, sala de necropsias y hospital veterinario.