Beirut.

El gobierno sirio y su aliado ruso intensificaron los bombardeos en las zonas controladas por rebeldes y yihadistas en Alepo y otras regiones del norte del país, y mataron en las últimas horas a unos 70 civiles, informó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH). Otros 30 rebeldes perecieron en un ataque suicida en un puesto de control en la frontera con Turquía.

Los barrios rebeldes en Alepo sufrieron este fin de semana intensos bombardeos aéreos, señaló este domingo el OSDH, y añadió que el gobierno sirio y su aliado ruso también atacó la provincia vecina de Idleb, en manos del llamado ejército de la Conquista desde 2015 (una alianza entre rebeldes y yihadistas del frente Fateh al Sham antes frente Al Nusra, actualmente escindido de Al Qaeda).

Al menos 45 civiles murieron en los bombardeos en Alepo y 22 en la provincia de Idleb, precisó el OSDH, mientras nueve civiles fallecieron por disparos de rebeldes en la zona oeste de Alepo controlada por las fuerzas del gobierno sirio.

Desde 2012 Alepo está dividida entre los rebeldes que ocupan los barrios orientales de la ciudad y las fuerzas del gobierno presentes en los occidentales.

Las tropas sirias apoyadas por combatientes iraníes, iraquíes y el Hezbolá libanés se enfrentan al ejército de la Conquista por el control.

En tanto, un ataque de un coche bomba dejó 30 rebeldes muertos y 22 heridos en Idleb, cerca del paso fronterizo de Atme, que comunica con Turquía, indicó el OSDH, con sede en Londres.

En otro conflicto en la región, en Yemen 10 niños murieron en una escuela ubicada en una zona bajo control de los rebeldes hutíes bombardeada por la aviación de la coalición árabe dirigida por Arabia Saudita, indicó la organización Médicos Sin Fronteras.