Las fuerzas de seguridad brasileñas volvieron a detonar de manera controlada un paquete sospechoso en el Parque Olímpico de Río de Janeiro. Según comunicó el portavoz del comité organizador, Mario Andrade, la maleta fue hallada en un baño del centro de televisión. Dado que no se pudo localizar al dueño, el jefe de seguridad llamó a expertos del Ejército. El edificio, en el que trabajan las cadenas televisivas internacionales, no tuvo que ser evacuado. Tras detonarlo se encontraron restos de cables, pero ningún explosivo, dijo Andrade. Se trata de la tercera explosión controlada que se realiza desde que comenzaron las competencias.