A 37 se elevó el número de muertos por lluvias y deslaves en la Sierra Norte de Puebla, donde, según autoridades federales, todavía hay localidades incomunicadas, entre ellas Chicahuaxtla, junta auxiliar del municipio de Tlaola, donde la única forma de llegar es por un puente provisional.

El director de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Ricardo de la Cruz, informó que el paso de la tormenta Earl ha dejado 51 muertos en tres estados: 37 en Puebla, 13 en Veracruz y uno en Hidalgo.

En la localidad de Xaltepuxtla, municipio de Tlaola, también se instaló un puente provisional y 122 personas continúan en un albergue desde el domingo pasado por los daños que sufrieron sus viviendas la noche del sábado.

La secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Rosario Robles Berlanga, y el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, recorrieron ayer Chicahuaxtla, donde desaparecieron seis de los ocho barrios y cuatro puentes resultaron severamente dañados por los remanentes de Earl.

Hay otras (comunidades) más arriba que están incomunicadas. Tenemos que hacer que lleguen las brigadas del Ejército, de las policías Federal y estatal y de la Marina. Esa es la prioridad, expresó Robles Berlanga.

No obstante, el secretario de Infraestructura y Transporte del gobierno de Puebla, Diego Corona, dijo que ningún poblado del estado se encuentra incomunicado por los deslaves, pues tanto los habitantes como personal de apoyo pueden llegar rodeando.

Explicó que 560 trabajadores de esa dependencia limpian caminos en los municipios de Eloxochitlán, Esperanza, Huauchinango, Chilchotla, Hueyapan, Juan Galindo, Quimixtlán, Tlaola, Xicotepec, Zacatlán y Tlatlauquitepec.

En la ciudad de México, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión expresó sus más sentidas condolencias y solidaridad a los habitantes de Baja California Sur, Hidalgo, Puebla y Veracruz que perdieron familiares a consecuencia de Earl.

Asimismo se manifestó por que los gobiernos de estas entidades intensifiquen sus acciones de protección civil y, en coordinación con el gobierno federal, ofrezcan todo el apoyo necesario a cada comunidad afectada