Agrupaciones ambientalistas y de la sociedad civil acusaron a la Comisión Reguladora de Energía de poner en riesgo la salud de la población, ya que el Comité Consultivo Nacional de Normalización sobre Hidrocarburos, Petrolíferos y Petroquímicos hizo caso omiso a sus propuestas y a las recomendaciones de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en torno a la calidad que deben cumplir los combustibles en cada etapa de la cadena de producción y suministro.

El Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Fundar Centro de Análisis e Investigación, la Red Ambiental Mexicana, El Poder del Consumidor, entre otras, preguntaron al gobierno: ¿A quién se quiere proteger, los intereses particulares de unos cuantos o la salud y calidad de vida de los mexicanos?

Advirtieron que el anteproyecto de la norma mexicana 016 que remplaza a la 086, abre la

Recomendación ignorada

Dicha comisión hizo a un lado la recomendación de la Semarnat en torno a las concentraciones de azufre, benceno, olefinas y aromáticos argumentando que en Estados Unidos y en otros países la transición a valores inferiores se llevó a cabo en forma gradual y en promedio duró siete años.

Refirieron en un comunicado que los aromáticos son reconocidos como agentes cancerígenos y precursores de ozono.

La instancia desechó la sugerencia de que el contenido promedio de azufre en las gasolinas sea de 10 partes por millón (ppm) en gasolinas y 15 ppm en diésel en todo el país a partir del próximo año y que están ampliamente documentados en el control de emisiones de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos. La propuesta de norma oficial establece un promedio de 30 ppm y un máximo de 80 ppm de azufre en los energéticos, lo cual coloca a México en un rezago frente a su socio.

Para el diésel, la NOM 016 establece un máximo de 15 ppm para zonas metropolitanas y fronteriza, así como en 11 corredores de distribución, y lo incrementa a 500 ppm para el resto del país.

Externaron su preocupación por la aceptación del uso de etanol como oxigenante en gasolinas hasta un máximo de 5.8 por ciento, lo que ocasionará aumento de 55 por ciento en la formación de ozono por vehículo al día.