Sólo 20 por ciento de las empresas de outsourcing del país cumplen con la contratación legal de trabajadores y los esquemas de afiliación al IMSS y al Infonavit; aproximadamente 80 por ciento de estas compañías han creado diversos sistemas para evadir el pago de impuestos y llegan al extremo de contratar a empleados bajo conceptos amañados como derechos de autor, asociados o igualas, para eludir sus obligaciones fiscales.

En conferencia de prensa, Arleth Leal, directora general de consulting de la firma de outsourcing Redring, sostuvo lo anterior y añadió que la reforma laboral legalizó y sacó de la oscuridad a estas empresas, pero en realidad la gran mayoría no cumplen la regulación laboral.

Sólo una mínima parte operan bajo los esquemas legales, el resto siguen trabajando en condiciones no permitidas y es necesario que esta situación se sancione, indicó.

Leal y Fabien Chemlel, director comercial de la firma, presentaron ayer un panorama de como están operando estas empresas y puntualizaron que 80 por ciento del mercado lo dominan firmas de subcontratación que se manejan en la informalidad, que simulan ser cooperativas o que se amañan con sindicatos para la contratación barata de trabajadores y con evasión fiscal.

Lo grave, según advirtieron, es que esos esquemas de contratación, sin el pago debido de impuestos, finalmente a quien más afectan es a los trabajadores, que se quedan sin protección de seguridad social, sin posibilidad de tener acceso a créditos de vivienda y de pensionarse, además de que les pagan muy bajos salarios. Incluso hacen que se mantenga la alta tasa de informalidad en el país, que se ubica en 56 por ciento de la población económicamente activa.

Indicaron que hace 15 años había a lo mucho 100 empresas que se dedicaban a la terciarización, es decir, a la contratación de trabajadores para otras compañías; ahora son casi 2 mil, pues ha crecido mucho esta actividad. Sin embargo, la reforma laboral no ha frenado la competencia desleal en este sector.

Chemlel dijo que del total de estas empresas, casi mil 900 evaden todos los impuestos y cuotas al Infonavit e IMSS, y por eso cobran uno por ciento de servicio, pero aclaran que no se hacen cargo de ninguna carga fiscal o de seguridad, tienen cerca de 2 millones de empleados en esta condición. En cambio las empresas que operan en la legalidad cobran 30 por ciento sobre servicio, pero cubren todos los impuestos.

Debería haber una gigantesca auditoría para acabar con esos vicios legales, porque se trata de una elevada elusión fiscal, remató.