La Armada de México culminó su participación –por segunda ocasión consecutiva– en las maniobras navales internacionales Rimpac 2016 (The Rim of the Pacific Exercise), que se realizaron frente a las costas de Hawai y San Diego, California.

Con un desembarco anfibio, elementos de fuerzas especiales de infantería de Marina y marinos de Estados Unidos realizaron un ejercicio combinado que incluyó el lanzamiento de vehículos anfibios desde el buque Usumacinta A-412 y el desembarco desde patrullas interceptoras.

En esta ocasión la delegación mexicana constó de 470 elementos de la Secretaría de Marina, de los cuales 150 pertenecen al cuerpo de infantería de Marina (20 son de las fuerzas especiales), el buque Usumacinta, cuatro patrullas interceptoras, un avión Air King 350 y un helicóptero MI-17.

De acuerdo con fuentes navales, en esta ocasión los marinos mexicanos realizaron más ejercicios de interoperatibilidad con sus contrapartes provenientes de 26 naciones; además, tanto en el desembarco del vehículo anfibio –de la Armada estadunidense– como a bordo de las interceptoras participaron elementos de los dos países.

Los marinos mexicanos también tomaron parte activa en el planeamiento de los ejercicios, que reunieron un total de 40 buques, 200 aeronaves y 25 mil elementos navales, así como en su ejecución.

Además, practicaron fuego nocturno en ejercicios de combate urbano en las playas de San Diego.

El pasado lunes, en un escenario ficticio, seis vehículos anfibios tripulados y cuatro interceptoras desembarcaron a miembros de las fuerzas especiales, de México y Estados Unidos, quienes al arribar a la playa establecieron un dispositivo de seguridad para emprender el avance de las tropas y la continuidad de las operaciones.

La Secretaría de Marina precisó que con el citado ejercicio se estandarizaron procedimientos operativos y se incrementó la capacidad de planeamiento y conducción de las operaciones navales.

En cada uno de los entrenamientos combinados realizados en Rimpac 2016, el personal naval también incrementó su capacidad de respuesta operativa en tareas de auxilio a la población y búsqueda y rescate, así como en técnicas, tácticas y procedimientos para el cumplimiento de su misión en materia de defensa exterior y mantenimiento del estado de derecho, indicó la dependencia.

Al final, la Armada de México ofreció una demostración del Plan Marina que se aplica en casos de desastres naturales, al instalar en tierra todo el equipo material que se utiliza en estos casos, como puestos médicos, sanitarios, cocinas para alimentar a la población civil, alojamiento, además de la participación de binomios caninos para la búsqueda de personas desaparecidas.