Mexicali, BC.

El Órgano de Fiscalización Superior de Baja California (Orfis) detectó en la cuenta pública de 2013 daño al patrimonio del organismo administrador del agua potable en Tijuana, que benefició con tarifas domésticas a desarrolladores de vivienda; además, dejó de pagar cuotas de seguridad social de sus trabajadores y contrajo deuda pública de una entidad estatal.

Por estas irregularidades, el Congreso del estado rechazó la cuenta pública de ingresos, patrimonio y deuda pública de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (Cespt) correspondiente al último periodo de gestión de Hernando Durán Cabrera, de enero a octubre de 2013.

El Orfis señaló que los desarrolladores de vivienda pagaron una tarifa de sólo 69 pesos con 68 centavos por metro cúbico de agua, cuando el cobro debió ser de 240.77 pesos, por uso comercial o industrial. Por esta anomalía se dejaron de recaudar más de 25 millones de pesos.

Durante ese periodo las cuentas vencidas de la Cespt por consumo residencial, comercial, industrial y de gobierno sumaron 658 millones de pesos y el saldo de deudores que firmaron convenios era de 414 millones de pesos.

También tenía cuentas por cobrar por cerca de 25 millones de pesos del Instituto de Vivienda del Gobierno de Baja California, por 4 millones 131 de la empresa Martoc Ingenieros Civiles SA de CV y del ayuntamiento de Tijuana por 5 millones de pesos.