Andrés Manuel López Obrador rei-teró su llamado al diálogo entre el gobierno federal y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), sin simulaciones, en busca de una salida negociada, pacífica, sobre la reforma educativa.

Propuso cuatro puntos para resolver la crisis: que se dé a conocer la investigación judicial y se castigue a los responsables de la represión en Nochixtlán, Oaxaca; se libere a los maestros injustamente encarcelados, a los que les fabricaron delitos; se regularice la situación laboral de los profesores, para que las cosas queden como estaban antes de la reforma educativa, y que se convoque a periodo extraordinario de sesiones para que se realicen las modificaciones correspondientes a la mencionada reforma.

Pidió que el Congreso revise la reforma educativa como hizo con la ley anticorrupción cuando los empresarios se inconformaron. Lo mejor para no equivocarse es consultar a los ciudadanos, el método democrático, destacó.

Manifestó que fue un error del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, lanzar el ultimátum de que iban a utilizar la fuerza, porque ahora los instigadores están pidiendo que se actúe, que el gobierno en su conjunto tome la decisión de reprimir, y eso no soluciona el problema.

Indicó que el gobierno debe tener autoridad moral y no inventar, como hizo con los dirigentes magisteriales detenidos, a quienes se les fabricaron delitos, porque no es cierto que hayan lavado dinero; fue una medida, por decir lo menos, irresponsable de las autoridades.

Afirmó que no conviene seguir apostando a las vencidas para ver quién gana: el gobierno, (Enrique) Peña o los maestros. Vamos a ganar todos si hay diálogo, si se busca una salida negociada, pacífica.

López Obrador consideró que si el gobierno toma la iniciativa, las cosas se van a serenar como por ensalmo, los maestros van a actuar de manera responsable, como siempre lo han hecho; van a estar a la altura de las circunstancias, se van a terminar las movilizaciones.

Aseguró que no conviene apostar al desgaste, a que pase el tiempo, a la guerra mediática, que la puede ganar el gobierno, pero no va a resolver el problema. Mucho menos conviene que se quiera resolver con el uso de la fuerza.

Resaltó que quiere el cambio por el camino de la concordia, pues está en contra de la violencia. Ojalá sirva este llamado para que de inmediato se inicie el diálogo, se haga a un lado la simulación. Estar aparentando que se va a dialogar y no se resuelve nada, y se está apostando al desgaste, a que pase el tiempo o esperando la oportunidad para hacer sentir la fuerza del Estado.