Ottawa, Canadá.

La Cumbre de Líderes de América del Norte giró en torno a las amenazas de Donald Trump que de llegar a la presidencia de Estados Unidos renegociará o incluso anulará el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) establecido en la región hace 22 años. Enrique Peña Nieto, de México; Justin Trudeau, de Canadá, y el estadunidense Barack Obama defendieron en todos los tonos los niveles de intercambio, integración y avances alcanzados a través de ese instrumento.

Aunque tuvo la precaución de aclarar que no señalaba directamente a nadie y reiterar el respeto de su gobierno al proceso electoral estadunidense, el presidente Peña atacó aquellos actores políticos, liderazgos que asumen posiciones populistas, demagógicas con pretensiones de destruir lo construido a lo largo de décadas.

Ubicó como ejemplos de esos líderes a Hitler y Mussolini por cuanto propusieron a sus sociedades, y el resultado todos lo conocemos: una devastación, una tragedia, de la historia de la humanidad en el siglo pasado.

Llevar las riendas de un país, asumir la responsabilidad de gobernar, es algo más que dar respuestas sencillas, es complejo y difícil, insistió Peña Nieto.

Defendió que nunca antes una sociedad global, y menos las de Estados Unidos, México y Canadá, habían tenido condiciones de desarrollo y de bienestar como hoy las tienen.

Eso se construyó, dijo, a lo largo de muchos años, con un modelo de apertura de libre comercio, de acuerdos comerciales, y hoy el gran reto es asegurar que los beneficios efectivamente lleguen a todos.

Y recalcó, pero la solución no es destruir como algunos proponen, no es optar por otra vía y por una ruta de aislamiento, sino es acelerar el paso en favor del desarrollo.

Peña Nieto, que en sus intervenciones y ataques al populismo, tuvo en algún momento una confusión semántica con el presidente Obama sobre el término, pues el jefe de la Casa Blanca asumió haber hecho una campaña popular, insistió en que sus afirmaciones no deben interpretarse como dirigidas a alguien en particular, pero insistió en que el mundo vive una realidad de mayores exigencias y que en distintas partes hay actores políticos con posiciones que parecieran vender propuestas muy fáciles, eventuales soluciones a los problemas, lo cual no es así de simple, ni así de sencillo.

En su mensaje en la conferencia de prensa conjunta con Trudeau y Obama, el mandatario mexicano hizo también un reconocimiento al jefe de la Casa Blanca en su última asistencia a este tipo de encuentros, y por trabajar de manera decidida por una América del Norte unida, integrada, competitiva más prospera e incluyente.

También el haber fomentado y promovido una alianza estratégica e impulsar una agenda bilateral con México en distintos frentes, más allá del tema de la seguridad y donde se incluyeron cuestiones como energías limpias, fronteras más seguras, comercio más rápido, ágil y competitivo y cooperación en educación, cultura e innovación, ciencia y tecnología.

Peña Nieto expuso que a México correspondió en esta cumbre abordar el tema sobre competitividad comercial y fronteriza, y anunció la creación de ventanillas únicas y de facilitación de trámites de fronteras. Entre las medidas se decidió hacer un mapeo de clusters del mar del norte como un elemento central de la toma de decisiones y tenerlo listo lo antes posible.

Asimismo, se acordó un programa trilateral de viajero confiable basado en el instrumento global entry con quioscos electrónicos, como los que ya operan en Estados Unidos basados en este modelo para hacer más fácil y rápido el tránsito de las personas por la región.

Además, ilustró la importancia de la integración de los tres países con las políticas de conservaciones del hábitat de la mariposa monarca que, mientras hace dos años se asentaba apenas en una superficie menor a una hectárea, este año llegó ya a 4.1 hectáreas y se espera que alcance seis para 2018.

Esta cumbre, insistió Peña, da testimonio de que los esfuerzos aislados son insuficientes. Si queremos resultados para el desarrollo es mejor trabajar juntos como región.

Frente a los retos globales, indicó, el aislamiento no es la solución y en contraste con otras latitudes, estamos decididos a estar más cerca de hacer equipo, a complementarnos y a salir adelante juntos como la región más competitiva del mundo.

Sobre temas como el Brexit o los amagos de Donald Trump, el mandatario mexicano indicó que a veces no se valora suficientemente lo que se tiene hasta que se pierde y que la integración de América del Norte ha logrado abrir en los tres países mayores oportunidades para las sociedades, el comercio creciente y las inversiones.