El operativo de desalojo de la Policía Federal, el pasado domingo en Nochixtlán, Oaxaca, en el cual murieron ocho personas, fue calificado por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, de situación grave y extraordinaria, que deberá investigarse de forma exhaustiva, puntual y transparente.

Señaló que la renuncia a su cargo no está en esta circunstancia, pero habrá una investigación para determinar si fue adecuado el uso de armas por los elementos estatales y federales que participaron en el desalojo en las vías de comunicación.

Además, se deberá indagar quién dio la orden para su uso y si ésta obedeció a los protocolos señalados para el uso de la fuerza. Incluso, dijo, se deberá conocer si la población civil también tenía armas de fuego.

Se ha dicho con toda claridad que se habrá de hacer una investigación, y por supuesto buscar responsables, de un lado y del otro, aseveró Osorio Chong en la conferencia conjunta con el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, con quien se reunió gran parte de la tarde y noche de ayer para analizar la situación que vive la entidad, derivada del conflicto magisterial.

En el salón Juárez de la dependencia, el responsable de la política interna del país declaró que para resolver este conflicto y la situación que se vive en Oaxaca, el gobierno federal está dispuesto a construir acuerdos, pero en el marco legal.

Sólo por la vía de la legalidad, sólo por esta vía es posible construir acuerdos y ejercer derechos, que sean los argumentos y no la violencia el puente para buscar los caminos de solución, insistió.

Consultado sobre una alternativa de solución a los reclamos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), sostuvo que siempre hemos escuchado sus razonamientos y se mostró abierto al diálogo y los acuerdos, pero dentro de la ley.

Osorio Chong ratificó que el gobierno federal seguirá trabajando de manera conjunta con el de Oaxaca para garantizar la tranquilidad de las comunidades. En tanto, el gobernador Gabino Cué aseguró que no solicitará licencia a su cargo, por lo que concluirá su gestión el próximo 30 de noviembre.

Momentos antes, en el mismo salón, el comisionado de la Policía Federal (PF), Enrique Galindo; el secretario de Seguridad Pública de Oaxaca, Jorge Alberto Ruiz, y el titular de la Fiscalía General del Estado, Héctor Joaquín Carrillo, informaron que fueron ocho los muertos (ninguno de ellos maestros) durante el enfrentamiento entre integrantes y simpatizantes de la CNTE y elementos policiacos en Nochixtlán.

Informaron que se seguirán todas las líneas de investigación para dar con los culpables, y si funcionarios públicos resultan responsables, serán sancionados.

El comisionado de la PF confirmó que casi un centenar de elementos de esa corporación resultaron lesionados durante los enfrentamientos, tres de ellos por arma de fuego y otros tantos por cohetones, petardos y objetos punzocortantes, particularmente machetes. De ellos, informó, aún permanecen hospitalizados 12, cuya vida no corre peligro. Asimismo, reconoció que tres efectivos federales siguen retenidos hasta esta noche por pobladores de Nochixtlán y profesores.

Indicó que sólo a la fiscalía del estado se informará sobre el tipo de armas que se utilizaron en el operativo. Incluso, para colaborar con las indagatorias, y de ser así requerido, se pondrá a disposición de esa instancia estatal el armamento usado por los federales.

Por su parte, el secretario de Seguridad Pública del estado detalló que 12 elementos de esa corporación fueron heridos en la refriega, y dos de ellos con arma de fuego.

A su vez, el fiscal general informó que ya se realizan las indagatorias para determinar quiénes iniciaron los disparos y de dónde provinieron, así como qué tipo de arma ocasionó la muerte de siete de los ocho muertos, uno de ellos debido a la manipulación de un cohetón. Añadió que ya se puso a disposición del Ministerio Público a 23 presuntos responsables, de los cuales cuatro son maestros.

El comisionado Galindo insistió que en un primero momento los elementos de la PF no iban armados, lo que consta incluso en un acta de notario público, como marcan los protocolos para la realización de dicho operativo.

Aseveró que la participación de los uniformados federales se dio luego de que se recibió la solicitud del gobierno del estado para realizar un operativo conjunto para recuperar (esa parte de) la autopista que conecta a la Ciudad de México con Oaxaca, la cual llevaba siete días bloqueada en el municipio de Nochixtlán.

Interrogado sobre la posible responsabilidad de los uniformados de su corporación al accionar armas de fuego, señaló: Tenemos que respetar los tiempos (de la investigación), pero por supuesto que asumimos la responsabilidad en caso que así corresponda.