La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) deberá dar a conocer el número de vehículos aéreos no tripulados (drones) que ha operado entre los años 2000 a 2015, sean o no de su propiedad, ordenó el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).

Con ello, el instituto revocó la respuesta que la dependencia ofreció a la solicitud de un particular con el argumento de que es confidencial por asuntos de seguridad nacional.

La decisión de los comisionados del Inai fue muy dividida (cuatro a tres) pero finalmente se impuso la argumentación que consideró que ofrecer datos estadísticos no conlleva riesgo para las estrategias militares, revocándose incluso el proyecto presentado por la comisionada presidenta, Ximena Puente, que sólo instruía a la Sedena a fundamentar mejor la clasificación de esta información.

El comisionado Óscar Guerra sostuvo que difundir el número de drones no impacta en la capacidad de respuesta de la Sedena, pues ‘‘es un dato numérico aislado que no revela información adicional que entorpeciera la labor de la dependencia, como pudiera ser la localización geográfica de estas aeronaves, la estrategia con la que se despliegan, el modo en que operan, entre otros aspectos’’.

Por su parte, el comisionado Joel Salas estimó que la entrega de esta información no provoca ningún desequilibrio en la capacidad de reacción, planeación o estrategia de la Sedena para combatir al crimen organizado. A su juicio, transparentar esta información permitiría conocer el esquema de adquisiciones del sujeto obligado.

En contraparte, el comisionado Rosendo Monterrey consideró que difundir el número de unidades no tripuladas ‘‘implicaría la revelación de información que pudiera ser utilizada para actualizar o potenciar amenazas a la seguridad nacional de nuestro país’’.