En México se registran 170 casos por 100 mil habitantes de enfermedad cardiovascular, indicador que se ha mantenido estable desde 2002, mientras en otros países, como Guatemala, bajó la cifra de afectados en casi 20 por ciento en una década y en Estados Unidos, 50 por ciento, advirtió Juan Verdejo Paris, director de Enseñanza del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez (INC).

Los datos son de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y dan cuenta de la gravedad de las afecciones cardiovasculares, indicó. Señaló que al año, estos males ocasionan unas 150 mil muertes en el país, aunque con el avance de la tecnología, algunos afectados no mueren al primer infarto; sobreviven pero al final fallecen por insuficiencia cardiaca. Esto es así porque la ciencia médica permite controlar los padecimientos, apuntó.

Verdejo resaltó que pese a la gravedad de las afecciones cardiovasculares y el riesgo que representan para la salud y la vida, la sociedad no toma conciencia de ello. Por eso persisten actitudes como sedentarismo y alimentación con elevados niveles de grasa y azúcares que favorecen sobrepeso, obesidad y diabetes.

En conferencia de prensa, el director del INC, Marco Antonio Martínez Ríos, informó de la realización del Congreso Mundial de Cardiología y la Salud Cardiovascular, del 4 al 7 de junio en la Ciudad de México, y que reunirá a más de 200 profesores de varios países, quienes compartirán avances médicos con los más de 5 mil asistentes.

Ahí, los expertos del INC presentarán dos casos de cardiopatías congénitas que se pueden controlar con herramientas diagnósticas y quirúrgicas modernas. Los niños recuperan la salud y pueden llevar una vida normal.

Estos males se presentan en ocho a 12 casos por cada mil recién nacidos, explicó Juan Pablo Sandoval, especialista en cardiología pediátrica. En el INC, centro de referencia nacional, se realizan 700 procedimientos de cateterismo al año, de los cuales 80 por ciento corrigen la anomalía.

Sin embargo, resaltó Martínez Ríos, los problemas más frecuentes son infartos agudos al miocardio y sus secuelas en adultos, resultado de la obesidad, diabetes, colesterol elevado e hipertensión arterial.

El INC cuenta con 264 camas de hospital y la ocupación está al ciento por ciento. Al año otorga 120 mil consultas y sólo el fin de semana pasado, dijo, se realizaron cinco procedimientos de angioplastía a igual número de personas que llegaron con infarto.

Verdejo comentó que la mayoría de los afectados que llega al INC tiene más de 60 años. Sólo una tercera parte está por debajo de ese rango, generalmente son hombres, y por tanto, cuentan con la cobertura del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del Seguro Popular.

El problema es para las mujeres, que también sufren infartos al miocardio, pero en su mayoría después de los 60 años. El INC atiende a población sin acceso a instituciones de seguridad social.