La Galería López Quiroga muestra 19 óleos de Miguel Cervantes
papeles privadoseróticos
Martes 24 de mayo de 2016, p. 8
El curador, museógrafo y pintor Miguel Cervantes (CDMX, 1942) admite experimentar cierto pudor respecto de los papeles
que exhibe en la Galería López Quiroga, debido a su naturaleza erótica, tema que aborda por primera vez.
A esos papeles, los califica de privados porque los trabajó con cierto sentido de autocensura
, pues no quería ir demasiado lejos, aunque le parecía que a veces lo hacía.
Entonces, revelaba el exceso, el erotismo por el erotismo
, la provocación. Como ésta no le interesa, incluso, dudó en exhibirlos. Las escenas del amante masculino, en fin, sí son muy privadas, de allí el título de la muestra de 19 óleos a la trementina sobre papel nepalés.
El material se lo regaló su amigo el artista Jan Hendrix, con quien comparte el amor por el papel como materia.
Cervantes explica que el óleo es muy delgado, trabajado casi como acuarela. De índole figurativa, la composición está hecha en tonos naranjas.
Cervantes dice a La Jornada haber sido colorista, por ejemplo, en la exposición que presentó en 1969 en el Museo del Palacio de Bellas Artes, la cual fue elogiada por Rufino Tamayo.
Papeles privados: 2012-2013 tiene que ver con Egipto, país con el que el autor mantiene una relación desde hace 30 años, porque allí vive su amigo Ahmed. Aunque no se trata del color de la piedra egipcia, Cervantes explica que hay un naranja que allá se produce; es muy intenso. “Como compensación hay un morado, un azul, pero en realidad toda la paleta es naranja.
No es dibujo, sólo la mancha donde el tacto se transforma en contorno. Un depósito bronco y silenciado como una mastaba de barro
, escribe Osvaldo Sánchez en el texto del catálogo.
Del historiador del arte francés Georges Didi-Huberman, se cita: “El encarnado sería el colorido infernal por antonomasia, por la sencilla razón de que es menos el predicado coloreado de determinada sustancia –localizada en el fenómeno-índice del movimiento mismo del deseo– en la superficie tegumentaria del cuerpo”.
Miguel Cervantes trabajó la presente serie en el transcurso de ocho meses, incluso, tardó cuatro meses en una sola obra porque lo borró, lo volvió a hacer hasta que por fin quedó a su gusto. Es una serie terminada porque nació de una inspiración erótica
y no tiene previsto otra.
Los cuerpos de las obras están a una escala casi de uno a uno
con el espectador. En efecto, no están vistos desde lejos. Es un voyeurismo muy propio. Casi hago partícipe al espectador de la escena o del cuerpo. Y me hago partícipe también
, dice Cervantes.
El artista tiene su estudio en Luxor, de allí que tiene vista al templo de Luxor y al Valle de los Reyes. Fue en Egipto donde descubrió la piedra como materia: No era muy sensible a la escultura, pero en Egipto me volví inmensamente sensible a la piedra, al relieve, el gran relieve egipcio. Toda la escultura egipcia tiene que ver con la luz clara y los movimientos de la luz solar. El relieve está colocado siempre en función de la luz
.
Papeles privados: 2012-2013 concluirá el 28 de mayo en la galería de Aristóteles 169, Polanco.