l cambio de color político en el ayuntamiento de Madrid, ahora presidido por la independiente Manuela Carmena –quien recibió el apoyo de varias plataformas ciudadanas y políticas, entre ellas Podemos–, ha traído una buena noticia para una de las arterias más importantes de la ciudad.

Se trata del llamado eje Prado-Recoletos, que comunica el sur y el norte de la capital española y donde se encuentran algunos de los sitios más visitados por los turistas internacionales, como el Museo del Prado, la Estación de Atocha o el estadio Santiago Bernabeu.

Si hace sólo unos años el gobierno del derechista Partido Popular (PP) tuvo que echar atrás un plan que pretendía talar algunos de los árboles más antiguos, robustos y bellos de esta calle, parecida al Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, ahora lo que las autoridades realizan es la plantación de 189 árboles de calibre superior.

En el proyecto también se tomó en cuenta la estructura de los edificios emblemáticos y los diferentes conjuntos escultóricos que se distribuyen a lo largo del paseo.

Entre los árboles que se plantarán destacan el peral de flor, el laurel, el liquidámbar, arces de Montpellier, un acebo azul y una paulownia.

En total este año, en Madrid se van a plantar 8 mil 17 árboles en zonas verdes y 4 mil 630 en viarios.

Un proyecto que además da un giro en la visión urbanista de la capital, pretende mejorar la calidad del aire y crear una armonía entre los edificios y los árboles que crecen en sus calles.

Armando G. Tejeda, corresponsal