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Acompañado por Angélica Rivera, constata la remodelación del Centro Brimmer

Buscamos dar vigencia plena a lo que la Constitución nos mandata: Peña Nieto
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El presidente Enrique Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera, en el Centro BrimmerFoto Cristina Rodríguez
 
Periódico La Jornada
Jueves 19 de mayo de 2016, p. 5

Trabajar en favor de la inclusión de las personas con discapacidad, así como proponer el matrimonio igualitario en todo el país, son ejemplos de cómo ‘‘estamos trabajando para dar vigencia plena y hacer realidad las garantías constitucionales’’, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto.

El que los grandes objetivos nacionales estén en la Carta Magna, no garantiza ‘‘que por sí mismos se logren’’, admitió. De ahí el empeño del gobierno para asegurar su vigencia plena y materializarlos en la realidad.

Peña Nieto inauguró ayer la remodelación del Centro de Rehabilitación para Personas con Discapacidad Gaby Brimmer, fundado hace 50 años, tiempo durante el cual el lugar no había sido objeto de arreglos.

‘‘Mucho te agradezco, amor’’, dijo el mandatario a su esposa, Angélica Rivera, el empeño aplicado por rehabilitar el centro. Ella, a su vez, usó la misma expresión para reconocerle ‘‘el gran trabajo que estás haciendo por la educación y por la salud’’ de los niños del país.

Tras recorrer una parte de las instalaciones –haría lo mismo en otras áreas más tarde–, el mandatario señaló: el gobierno federal ha hecho ‘‘un importante esfuerzo’’ por revolucionar el sistema educativo nacional, ponerlo al día con un modelo educativo que pasa ‘‘por tener escuelas dignas, maestros mejor preparados, capacitados, evaluados y estando todos los días sujetos a una permanente capacitación’’.

Como en la víspera, cuando firmó en Los Pinos una iniciativa para hacer posible el matrimonio igualitario, puntualizó: ‘‘Nos estamos ocupando en dar plena vigencia a lo que nuestra Constitución nos mandata’’, a los derechos ahí consagrados.

No es útil tenerlos por sí solos en la Carta Magna ‘‘si no son vigentes, si no logramos materializarlos en la vida diaria, si no aseguramos, en el caso de la educación, que toda la niñez y la juventud tengan derecho’’ a la misma. Y puntualizó: las tareas que tiene el gobierno son aquellas ‘‘que nos mandata la Constitución’’.

En las instalaciones del Centro Gaby Brimmer ahora se podrá cursar preparatoria abierta en el esquema de los Centros de Atención para las Personas con Discapacidad (Caed), de los cuales, dijo Peña Nieto, operan ya 250 en el país –contra 46 que había en 2012– y la meta es llegar a 500.

Ahí mismo, Angélica Rivera, presidenta del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), ubicó la importancia de dotar a este centro de mejores instalaciones, servicios y espacios. Habló de la unidad como elemento fundamental para dar mejores niveles de vida a las personas con discapacidad, ‘‘para que sean respetados en las escuelas, en el trabajo y en toda la sociedad’’ con la dignidad que merecen.

El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño, reiteró por su parte el inminente cumplimiento de la meta de tener una cobertura de 80 por ciento en educación media superior y anunció para las próximas semanas la presentación de los ‘‘nuevos planes y programas, los nuevos contenidos y la nueva pedagogía para el siglo XXI’’, como fue la instrucción del presidente Peña Nieto.

Hizo además un ‘‘reconocimiento profundo a nuestra primera dama’’, Angélica Rivera, por su ‘‘visión, compromiso y cercanía’’ con la niñez y la educación de México.

A su vez, la directora del DIF, Laura Vargas, expuso las nuevas condiciones del Centro Brimmer, donde en una primera etapa se invirtieron 23 millones de pesos. El sistema ha atendido –dijo– a más de 3 millones de personas con discapacidad en todo el país y se ha logrado colocar en diversos empleos a 12 mil.

Protesta magisterial

Una cuadra antes del Centro Histórico –en la avenida Emiliano Zapata, delegación Benito Juárez– unas 15 maestras de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación fueron detenidas por vallas del Estado Mayor Presidencial. Ellas pretendían, dijeron después, encontrarse con el presidente Peña y el secretario Nuño para entablar un diálogo.

Cuando se hubo ido el convoy presidencial, las docentes se apostaron en la entrada del lugar y en medio de consignas y llamados a la unidad a sus compañeras que ahí laboran rechazaron la reforma educativa.

Dijeron que el titular de la SEP sólo dialoga con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, cuando ellas también tienen amplia experiencia y estudios de posgrado para realizar su labor. Y de eso quieren hablar con las autoridades.