Establecer el derecho al voto a partir de los 16 años no significa que se tenga que cambiar la edad penal, señaló el secretario ejecutivo del grupo redactor del proyecto de constitución de la Ciudad de México, Porfirio Muñoz Ledo.

En una reunión con representantes de organizaciones civiles que trabajan con jóvenes, agregó que el concepto de ciudadanía universal, con el que se trabaja en la redacción de la carta magna local, se refiere a que a cada edad se tienen distintos derechos y obligaciones.

Todas las edades están determinadas en leyes que son de naturaleza distinta, manifestó Muñoz Ledo, quien agregó que en este caso de lo que se habla es de incluir el derecho al voto a partir de los 16 años en el proyecto de constitución, cuyo borrador, dijo estará listo a finales de junio.

Dijo que el tema continúa en análisis, pero que de concretarse tendrá todas las protecciones de ley necesarias, ya que, por ejemplo, los jóvenes tendrían que contar con una credencial para votar en la Ciudad de México, pues no hay una cédula de elector federal para esa edad.

Afirmó que no se contrapone con la Constitución federal, pues es parte de la autonomía que se logró con la reforma política. Consideró que es muy importante que haya una participación temprana de los jóvenes en la sociedad.

La titular del Instituto de la Juventud (Injuve) capitalino, María Fernanda Olvera, expresó que la forma en que se plantea este tema es totalmente de avanzada, ya que se le separa de otros aspectos, como la mayoría de edad a los 18 años, y se propone como un derecho específico.

Al señalar que de los 2.6 millones de personas de entre 12 y 29 años que habitan en la ciudad, 40 por ciento son de 14 a 18 años, manifestó que de ser incluido el punto en el proyecto de constitución tendrá que estar muy bien acotado en cuanto a la redacción, para que no se preste a ningún tipo de vacío o confusión.

En el encuentro, la funcionaria entregó a Muñoz Ledo un documento con propuestas consensuadas con distintas organizaciones, entre las que destaca incluir en el proyecto de carta magna el fortalecimiento institucional de la política juvenil por conducto de una dependencia, que puede ser el mismo instituto, o convertirlo en una secretaría o coordinación que dependa directamente de la jefatura de Gobierno.

Olvera Cabrera resaltó que en la Constitución federal no se hace referencia a los jóvenes, y aunque en otros estados sí se les menciona, no se profundiza en el tema, por lo que también se manifestó porque en la constitución capitalina haya un reconocimiento explícito de este sector de la población, así como establecer la obligación de todas las autoridades de respetar y garantizar sus derechos.