El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola, dijo que para el periodo 2016-2018 el instituto posee una cartera de inversión de 20 mil millones de pesos para construir 12 hospitales y 40 clínicas.

A nivel general, el IMSS tiene el objetivo de fortalecer la disciplina financiera para dar viabilidad de largo plazo, simplificación administrativa y elevar la calidad y calidez de los servicios. También, garantizar el pago puntual de pensiones a 3.5 millones de derechohabientes.

Para este año se proyecta ahorrar mil 602 millones de pesos en compras consolidadas y mil 500 millones en terapias de sustitución renal y una cantidad similar para contratar servicios de laboratorio. Asimismo, seguir con la reducción del uso de reservas. Durante 2015 se utilizó menos de la mitad del monto programado (20 mil millones) en el Presupuesto de Egresos de la Federación. Al mismo tiempo, se prevé elevar 26 por ciento la recaudación (de cuotas).

El funcionario habló ayer ante cientos de trabajadores afiliados a la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), la primera central obrera constituida en el país, en 1918. En la convención nacional cromista se religió a Rodolfo González Guzmán, para el periodo 2016-2022.

La central, señaló, tiene 350 mil afiliados en promedio, integrantes de sindicatos de todas las ramas. En este contexto, habló de los programas para agilizar la atención de los derechohabientes, por ejemplo, digitalizar al máximo los trámites para disminuir el modelo de atención presencial; optimizar quirófanos para el fin de semana, y disminuir los tiempos para la atención en urgencias y en servicios de especialidad médica.

El IMSS, dijo, es el proveedor de seguridad social más grande de América Latina. En un día ordinario, sus 430 mil empleados, atienden lo relacionado a más de 500 mil consultas; mil 200 partos; 4 mil 200 cirugías; 50 mil urgencias y en sus guarderías, a más de 204 mil niños.