Domingo 15 de mayo de 2016, p. 19
Santo Domingo.
Los dominicanos acuden este domingo a las urnas para elegir presidente, en unos comicios que se presentan con pocas novedades y entusiasmo en comparación con campañas pasadas, los cuales tienen como claro favorito al mandatario saliente, Danilo Medina, quien busca afianzar la hegemonía de su partido de centro, en el poder desde hace 12 años.
Considerado el presidente más popular de América Latina por la consultora mexicana Mitofsky, con 89 por ciento de aprobación en 2015, el economista, de 64 años, busca lograr un segundo mandato consecutivo por el Partido de la Liberación Dominicana.
Medina tiene una preferencia electoral de 63 por ciento y ganaría en primera vuelta al superar 50 por ciento más un voto, según uno de los sondeos más recientes de la firma Gallup.
Su principal y más cercano rival, el empresario Luis Abinader, del socialdemócrata Partido Revolucionario Moderno, quien obtendría 29 por ciento según Gallup, apuesta a una
La situación económica
El país caribeño, que comparte la isla la Española con Haití, tiene una economía pujante basada en el turismo, con un crecimiento de 7 por ciento en 2015 y una inflación de 2.3 por ciento, pero una pobreza que ronda 40 y un desempleo de 14.
Un total de 6.7 millones de dominicanos registrados en el padrón electoral, de una población de 10 millones, deberán elegir representantes para más de 4 mil cargos públicos, entre ellos el presidente, cargo al que aspiran ocho candidatos. Además vicepresidente, 262 congresistas y 3 mil 842 autoridades municipales para los próximos cuatro años.
El mandatario, quien cerró su campaña el jueves en Santo Domingo, exalta como su mayor logro la estabilidad económica del país. Con el lema Siempre con la gente
, promete crear miles de empleos, afianzar sus programas sociales, mejorar la economía familiar y mayor transparencia en la administración pública.
Medina ganó los comicios en 2012 para un periodo de cuatro años, sin opción a relección inmediata, pero en 2015 impulsó una reforma constitucional que le permitió buscar un segundo mandato, tras acuerdos políticos con opositores.
Presentándose como la nueva cara del cambio
, Abinader, de ascendencia libanesa, ofrece austeridad en el gasto público y mejorar la calidad de vida de los dominicanos.