A pesar del rescate por 73 mil 500 millones de pesos y cambios en su esquema fiscal que le permitirán disminuir el pago de impuestos en unos 50 mil millones de pesos anuales, Petróleos Mexicanos (Pemex) tendrá muy malos resultados financieros para el primer trimestre de este año, pronosticó el director general de la petrolera, José Antonio González Anaya.

En entrevista con la agencia Bloomberg realizada en Nueva York, el funcionario sostuvo diversos encuentros con analistas e inversionistas para explicar los ajustes presupuestales anunciados en febrero y el reciente paquete de ayuda económica del gobierno.

González Anaya reconoció en la entrevista la gravedad de la situación financiera de la petrolera mexicana y declaró: Si Pemex no ha encontrado socios para el próximo año, vamos a estar en un problema grave.

El pasado martes González Anaya y el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, sostuvieron en Nueva York diversas reuniones con inversionistas y directivos de instituciones financieras para refrendar las perspectivas económicas de la empresa, así como las oportunidades de inversión que se presentan como resultado de la puesta en marcha de la reforma energética, junto con la relevancia que juega Petróleos Mexicanos para el desarrollo económico del país.

Pemex informó que el martes, segundo día de su viaje a Nueva York, los funcionarios mexicanos ratificaron el respaldo financiero del gobierno federal a Pemex mediante la inyección de liquidez a la empresa por 73 mil 500 millones de pesos y la reducción de su carga fiscal que se verá reflejada, para 2016, hasta por 50 mil millones de pesos, además de una amplia estrategia de alianzas y asociaciones que, ante la caída de los precios del crudo a nivel mundial, eleven la rentabilidad de sus operaciones.

La estrategia del gobierno mexicano para su empresa petrolera fue bien recibida por analistas de los principales grupos financieros del país: Los apoyos anunciados son positivos, porque ayudan a Pemex a enfrentar sus dificultades de liquidez y le proveen mayor espacio para mejorar su situación financiera de corto plazo. No obstante lo anterior, será relevante que Pemex cumpla con las condiciones bajo las cuales estos recursos fueron otorgados y que se complementen con disposiciones que apoyen la mejora de su situación financiera a mediano y largo plazos, opinó el grupo financiero BBVA Bancomer en un reporte.

Es positiva, pero no cambia el riesgo de impago de la deuda emitida por la empresa, consideró la calificadora de inversiones Moody’s, luego de conocerse el plan de apoyo para la petrolera.

Para el grupo financiero Santander México, el fuerte choque petrolero, por la caída de los precios del petróleo de exportación, pero también por la baja en la producción interna, está resultando en la necesidad de una restructuración interna de Pemex, y por lo pronto los recursos que está otorgando el gobierno federal en esta ocasión están orientados a satisfacer las necesidades de liquidez de muy corto plazo.

A su vez, analistas del Grupo Financiero Banorte consideraron que las medidas anunciadas son un paso inicial en la dirección adecuada. Creemos que existe una manera de encontrar una trayectoria dinámica óptima para enfrentar los retos de liquidez y los ajustes estructurales de largo plazo necesarios para lograr una empresa más eficiente que acumule capital positivo. Diversidad de inversionistas nos han mencionado la necesidad de contar con un plan detallado en términos de cifras, proyecciones y metas temporales para que sea creíble. En la ausencia de una reforma fiscal que incremente los ingresos no-petroleros el gobierno aún será muy dependiente de Pemex, limitando el espacio disponible para cambios al régimen fiscal más allá de lo anunciado.

Pero ayer un reporte firmado por Adam Williams, de Bloomberg News, titulado: Director de Pemex, bajo presión de reclutar nuevos socios, al tiempo que se profundizan los problemas financieros, difundido por la agencia, dice que el nuevo director general de Pemex está en una carrera contra el tiempo para encontrar nuevos socios que puedan revitalizar las refinerías nada rentables y rescatar a la empresa de un desplome de 11 años en la producción de petróleo.