En la madrugada la terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) es más vulnerable a la inseguridad. Las instalaciones lucen descuidadas, principalmente en la zona de bancos y comida rápida y la terminal de autobuses.

Durante un recorrido a esa hora, se observó que en este perímetro no hay vigilancia o algunos elementos se quedan dormidos. En el ambulatorio, la docena de efectivos de seguridad pública y privada no realizan rondines.

Algunos expendedores de comida, guardaequipaje y tiendas que trabajan las 24 horas señalaron que en ocasiones hay personas que acechan a los pasajeros a quienes con engaños les piden dinero, asegurando que perdieron el pase de abordar, el boleto de estacionamiento o venden supuestas cadenas y anillos de oro para completar para su pasaje de avión.

También hay gente en situación de calle que se queda a dormir en la terminal. Nadie vigila. Todos los policías están en las puertas principales de llegadas y salidas. Incluso algunos, por seguridad, cerramos las puertas de vidrio para que no entre cualquier persona.

De acuerdo con información general de vuelos del aeropuerto capitalino, durante la una y las cuatro de la madrugada se realizan aproximadamente 15 operaciones aéreas en ambas terminales.

En el estacionamiento, con 2 mil 437 cajones, que opera los 24 horas los 365 días del año, también hay escasa vigilancia. Sólo hay policías cuidando las cajas para pagar los boletos.

Algunos locales del área comercial se encuentran vacíos, empolvados y hasta con los cristales rotos. El lobby del hotel de cinco estrellas NH, que tiene una oferta de 287 habitaciones, está abandonado.

En 2014, la subdirección de servicios comerciales entregó una circular a los arrendatarios para que los establecimientos de ambas terminales instalaran circuitos cerrados de televisión a fin de evitar pérdidas por robo, pero no todos cumplieron la disposición.