Bruselas. El grupo responsable de los atentados del 22 de marzo en esta capital planeaba una nueva operación en Francia, tras los ataques que dejaron 130 muertos el 13 noviembre en París, pero optaron por un objetivo más cercano, como Bélgica, luego de que la policía detuvo a los principales sospechosos de la matanza en la capital francesa, informó este domingo la fiscalía belga. A partir de varios elementos de la investigación, se deduce que el objetivo del grupo terrorista era golpear de nuevo a Francia y que al verse sorprendido por el rápido avance de la investigación decidió finalmente atentar en Bruselas. Las investigaciones revelaron que muchos de los atacantes vivían en Bélgica, entre ellos a los encarcelados Salah Abdeslam y Mohamed Abrini, que lograron eludir a la policía por más de cuatro meses.