San Luis Potosí, SLP.

Unos 150 habitantes de los ejidos San Matías y Morelos, municipio de Santo Domingo, marcharon por el centro histórico de San Luis Potosí en rechazo a la pretensión del empresario José Cerrillo Chowell de construir un tiradero de desechos industriales tóxicos en el rancho Palula, en perjuicio de su salud y del hábitat natural de la comunidad.

Durante el mitin, que efectuaron frente a palacio de gobierno, y apoyados por integrantes de comunidades wixarika, exigieron al gobernador priísta Juan Manuel Carreras López cancelar el proyecto que ya fue autorizado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Acusaron que el confinamiento de desechos tóxicos proyecta almacenar unas 182 mil 500 toneladas de residuos peligros cada año y se ubicaría en las cercanías de la Unidad de Conservación de Vida Silvestre Papula, establecida para criar y conservar ejemplares de venado cola blanca y pecari de collar.

Aseguraron que el basurero industrial no reúne las mínimas condiciones de legalidad, tal como lo asegura Cerrillo Chowell (dueño de la mina Negociación Minera Santa María de la Paz y Anexas y Mármoles La Paz), quien tramposamente ha presentado el proyecto como ecológico.

Después de la manifestación, representantes de los ejidos San Matías y Morelos, así como autoridades estatales y federales, se reunieron durante casi tres horas para llegar a acuerdos. Ahí acusaron que las autoridades están de lado de la empresa.