La pianista estadunidense Christina Naughton (Princeton, Nueva Jersey) nunca se imaginó que tocaría de manera profesional con su gemela Michelle. Ambas comenzaron de solistas y apenas sumaron sus talentos a finales de su paso por la preparatoria. Han resultado una verdadera atracción para el público internacional. ¿Cuántas gemelas tocan el piano a cuatro manos o cada quien en su instrumento con orquesta?

Las cuatitas Naughton, de 27 años, actuarán por vez primera en México este domingo a las 17 horas, en la sala principal del Palacio de Bellas Artes como parte de las actividades paralelas a El arte de la música, exposición que se presenta en el recinto marmóreo.

El programa incluirá Andante y allegro brillante para piano a cuatro manos, de Félix Mendelssohn; Andante y cinco variaciones para piano a cuatro manos en sol mayor, de Wolfgang Amadeus Mozart; Hallelujah junction para dos pianos, de John Adams, y Visiones del Amén para dos pianos, de Olivier Messiaen. Se trata de un programa con obras cercanas a su corazón.

Las piezas de Adams y Messiaen se incluyen en su disco más reciente, Visions, y equivalen a expresiones de alegría aunque de manera diferente. Las otras dos obras son de compositores (Mendelssohn y Mozart) que tuvieron hermanas y escribieron para ellas, de allí que nos pareció muy apropiado incluirlas, expresa Christina vía telefónica.

Según la pianista hay mucho potencial en cuatro manos: Es como oír hablar a cuatro personas. Además, encuentra maravilloso trabajar con la familia. Michelle y yo siempre fuimos muy unidas y ahora más, gracias al trabajo. Viajamos juntas, compartimos todo lo bueno; es grandioso. Sentimos que nos hablamos en el escenario. Incluso, se conocen tan bien que ni siquiera se tienen que preocupar por sincronizarse, ya que resulta natural.

Tener manos del mismo tamaño les permite una actuación más unificada. Aunque definitivamente es más difícil tocar piezas escritas para cuatro manos, resulta gratificante para el dúo. Claro, no siempre estamos de acuerdo en algo, pero son bienvenidas las diferencias, ya que hemos aprendido a beneficiarnos de ellas, no temerlas. Además, nadie en el mundo tiene ideas idénticas. Si a veces tenemos aproximaciones individuales, siempre conduce a algo mejor, asegura Christina.

La pianista recuerda que cuando empezaron a tocar juntas era como: oye, estás en mi espacio, ya que los artistas siempre protegen su territorio personal. Sin embargo, la proximidad física con alguien te vuelve una sola mente.

Las Naughton son graduadas de la Escuela Julliard y del Instituto de la Música Curtis, del que ambas recibieron el Premio Festorazzi. Son Artistas Steinway y actualmente residen en Nueva York.

Respecto del futuro y una posible carrera de solista, Christina se dice feliz de tocar con su gemela, y asegura: Siempre he sido muy abierta a la vida.