Dirigencia nacional decidirá postulaciones en Tjuana y Mexicali; protestan militantes
Miércoles 30 de marzo de 2016, p. 28
Mexicali, BC.
La designación de Carlos Loyola Peterson, directivo de la empresa IEnova (antes Sempra Energy), como candidato a la presidencia municipal de Ensenada provocó protestas y renuncias en el Partido Acción Nacional (PAN). Los inconformers señalaron que el industrial carece de trayectoria política.
El dirigente estatal del blanquiazul, José Luis Ovando Patrón, dio a conocer la decisión de postular como candidato ciudadano
a Loyola Peterson, sin militancia panista, ejecutivo del consorcio estadunidense propietario de al menos cuatro gasoductos en Baja California y dos plantas de generación de energía eléctrica para el mercado de California.
Ovando Patrón anunció que la designación de candidatos a las alcaldías de Tijuana, Mexicali y Ensenada será decisión de la dirigencia nacional, no resultado de una convención; además, para las dos primeros cargos se nombraría a varones y en el tercero podría ser hombre o mujer para cumplir con la equidad de género
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La diputada federal Eloisa Talavera Hernández solicitó licencia para contender en la convención panista. Sin embargo, ante la designación de Loyola sostuvo que interpondrá un juicio para defender sus derechos políticos, por considerar que una mujer debe ser la abanderada en ese municipio.
César Mancillas Amador –quien ya fue alcalde de Ensenada y diputado federal–, fue uno de los aspirantes a este puesto de elección popular que renunciaron a su militancia, al igual que integrantes de su familia (fundadores de Acción Nacional en ese puerto), tras considerar que dirigentes estatales y nacionales violaron los principios de ese partido.
Como gerente de asuntos externos de IEnova, Loyola Peterson anunció que la energía producida en el parque ubicado en La Rumorosa se destinará a California
En 1986 el PAN ganó la alcaldía de Ensenada con Ernesto Ruffo, por lo que se considera a este municipio cuna de los gobiernos panistas. Después ha habido alternancia entre gobiernos priístas y del blanquiazul, aunque desde 2010 las administraciones han sido de militantes del Partido Revolucionario Institucional.