Huautla, Hgo.

Un contingente integrado por 2 mil personas, entre ellas campesinos, amas de casa e integrantes del Frente Democrático Oriental de México Emiliano Zapata (Fdomez), marcharon hacia Chapopote Chico, Veracruz, para demandar el cierre de la base del 40 Batallón de Infantería, debido a que han padecido hostigamiento y amenazas de efectivos militares que incursionan en sus comunidades.

Los integrantes del Fdomez denunciaron que la presencia militar, día y noche, más que garantizar la seguridad tiene como finalidad reprimir a su organización, por lo que exigieron al gobierno federal la salida del Ejército de la región de la Huasteca, donde confluyen los estados de Hidalgo, Veracruz y San Luis Potosí.

Detallaron que los elementos castrenses han realizado patrullajes en las comunidades de Metlaltepec, 21 de Enero, Tzacuala, Chalingo y Amatzintla. El 13 de marzo incursionaron en Felipe Ángeles, Veracruz, además intentaron entrar a la casa que alberga las oficinas del Comité de Derechos Humanos de las Huastecas y Sierra Oriental, ubicadas en Tecoluco Calpan.

Sin que nadie se entere

Relataron que los militares, con gritos e insultos exigieron a dos integrantes de la agrupación abrir la puerta para revisar que había adentro de la casa y como no accedieron, les solicitaron identificaciones personales y amenazaron con desaparecerlos sin que nadie se entere.

Tres días después, narraron, un vehículo militar ingresó con cinco elementos a la comunidad de Metlatepec, municipio de Huautla, Hidalgo, por el camino de terracería que conduce a la galera publica y se desviaron hacia donde se encuentra la capilla de la localidad para salir a una escuela telesecundaria.

Puntualizaron que al notar la presencia de los militares, las mujeres tocaron la campana para convocar a los vecinos, lo que desalentó a los militares quienes se marcharon del lugar.

Los manifestantes gritaron consignas y entregaron volantes a los transeúntes para solicitar su apoyo y cuestionar que los efectivos militares en vez de garantizar el libre tránsito, como lo establece la Constitución, han llegado a retener a transportistas de la región, lo que genera temor y terror en la población.

Pidieron a organismos defensores de los derechos humanos tomar cartas en el asunto respecto de las incursiones militares y responsabilizaron a las autoridades de los tres niveles de gobierno por cualquier agresión física y sicológica contra los militantes del Fdomez y los pobladores de la región.