Cuernavaca, Mor.

El estacionamiento de una tienda Coppel construido en una zona federal del centro de la ciudad obstruye un canal de agua dulce que ahora desemboca en una barranca con aguas negras, lo que afecta a unas 400 familias que se abastecían del cauce desde hacía más de un año, acusó Cuauhtémoc Serratos, dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

Detalló que varias casas se han cuarteado y en un terreno de 5 mil metros cuadrados que el sindicato usaba para sus reuniones ya se aprecian daños ambientales, pues el líquido del canal se contamina con aguas residuales y la vegetación se está secando.

Narró que la tienda Coppel, ubicada en la avenida Adolfo López Mateos de la colonia Vergel, comenzó a edificarse hace dos años en una zona federal, con la anuencia del ayuntamiento de Cuernavaca y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

El canal conocido como de Acapantzingo, del alto Apatlaco, traía unos 80 litros de agua limpia por segundo; data del año 1700. Exigimos a la Conagua y al ayuntamiento que obliguen a Coppel a respetar el canal y nos restituya el agua; de ahí se riegan cientos de árboles que limpian el aire de la capital del estado, dijo.

Indicó que aunque el ayuntamiento colocó sellos de suspensión hace dos meses, el estacionamiento de Coppel sigue obstruyendo el canal y los habitantes continúan sin agua, con la cual regaban jardines y otras áreas verdes de la ciudad.

Javier Orihuela García, presidente de la Asociación de Usuarios del Alto Apatlaco, denunció que las autoridades de los tres niveles de gobierno no respetan las áreas federales. Les llegan al precio, dan permisos, pese que después esos lugares se inundan porque el agua siempre acaba por recuperar su espacio.

El dirigente solicitó al gobierno que la barranca de Amanalco, situada en la colonia El Pilancón adonde baja este canal de agua, sea rescatado y se convierta en un parque con áreas verdes para Cuernavaca y se castigue a la Conagua porque la obra no debió realizarse.