El Día Mundial del Agua se conmemora este martes en México con casi la mitad de los municipios en condiciones anormalmente secas hasta con algún grado de sequía. Se prevé que las circunstancias no mejorarán en los próximos meses, ya que la presencia del fenómeno El Niño las acentuará, indica el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

Además, en el territorio nacional hay injusticias hídricas que se expresan en que 67 por ciento del agua se concentra en cuatro regiones, en el sureste. Hay acuíferos sobrexplotados y contaminados, carencia de información sobre el estado real de las aguas nacionales e inequidad en la relación entre el líquido y el desarrollo económico, señalan por su parte especialistas del Centro de Investigaciones de Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas).

Pronóstico del SMN

De acuerdo con el Monitor de Sequía del SMN, hay 838 municipios que enfrentan condiciones anormalmente secas, mientras otros 238 padecen sequía desde moderada hasta extrema. En total, mil 135 municipios (de 2 mil 417 que hay en el país) enfrentan problemas de agua.

En el reporte más reciente sobre El Niño, el SMN señala que se mantiene con características de fuerte, lo que significa que habrá anomalías pluviales en gran parte del territorio, con excepción de Chihuahua, Coahuila, Guerrero y el norte de Chiapas.

Datos de 2015 de la Comisión Nacional del Agua indican que 67 por ciento del líquido se concentra en cuatro de las 25 regiones hidrológico-administrativas, ubicadas en el sureste del país, la zona con los peores indicadores nacionales de cobertura promedio de líquido entubado, ya que ahí es de 82 por ciento, mientras a escala nacional es de 90 por ciento, indica un análisis de Edith F. Kauffer Michel, investigadora del Ciesas.

Falta correspondencia entre la cantidad de agua y el acceso al líquido, que nos ubica en un universo de marcadas injusticias hídricas, donde las poblaciones más pobres son las más susceptibles de sufrir escasez y daños relacionados con este problema, como la mortalidad de menores de cinco años por enfermedades gastrointestinales, flagelo en el que Chiapas ocupa el primer lugar a escala nacional.

Se deben establecer políticas públicas que consideren la soberanía hídrica, considera Daniel Murillo en el libro Gestión pública y social del agua en México, editado por la UNAM, obra donde asienta que se deben revisar los marcos conceptuales sobre los que se basa la política nacional en la materia, como la gestión integrada de recursos del líquido y su gobernanza.

Tras varios lustros de observar los efectos de ambos conceptos en la práctica, se observa que México enfrenta un camino hacia una crisis hídrica.

Las políticas de trasvase, la fractura hidráulica planeada para extraer gas de lutitas, la afectación a cuerpos de agua y a la biodiversidad, la construcción de megaproyectos, la sobrexplotación creciente de acuíferos y la afectación a territorios indígenas, son ejemplos de la falta de sustentabilidad en la política hídrica, apunta.