En el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), principal organismo del gobierno federal que apoya a micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), no existe evidencia documental o comprobatoria, registros o informes completos que acrediten la aplicación de 871 millones 761.4 mil pesos en subsidios para la inversión durante 2014, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

La cantidad representa 16.3 por ciento de los 5 mil 317 millones de pesos que el Inadem ejerció en dicho renglón para las Mipymes a través del Fondo Nacional Emprendedor (FNE), casi la mitad del presupuesto total por 10 mil 245.2 millones de pesos que el fondo tuvo ese año. La ASF sólo auditó una muestra de mil 636.6 millones de pesos del FNE, pero encontró irregularidades en 53 por ciento de los recursos.

No se pudo conocer el porcentaje que el Inadem destinó a los subsidios para la población objetivo (las Mipymes) y cómo se aplicaron los recursos, indica la ASF, y acusa al instituto de sólo tener los informes finales de 238 de los 412 proyectos que financió (57 por ciento) y de reportar que se crearon 5 mil 825 Mipymes en 2014, cuando en su base de datos sólo se identificaron 4 mil 207, es decir 44.6 por ciento menos.

De entrada, la ASF destaca que salta una diferencia por 226 millones 368 mil pesos más en la base de datos de apoyos del Fondo Nacional del Emprendedor para los subsidios a la inversión respecto a la cantidad registrada en el ejercicio del presupuesto federal.

Por otra parte, el informe da cuenta de 14 casos con diferentes montos de dinero destinados a las Mipymes, que suman en conjunto los 871 millones 761.4 mil pesos referidos y que no están respaldados plenamente con documentos. El monto menor va desde 17 millones de pesos por remanentes de recursos no aplicados en la ejecución de dos proyectos, hasta 542.3 millones de pesos entregados a organismos intermediarios responsables de 238 proyectos, pero que no fueron supervisados por el Inadem para que entregaran su informe final.

Tampoco se proporcionaron los datos de cuenta bancarios que acreditaran la ministración de otros 124.7 millones de pesos a 49 organismos intermediarios ni de 100.8 millones de pesos autorizados a tres beneficiarios, e incluso aunque hay facturas para comprobar 8 millones 119.9 mil pesos pero que no especifican el bien o servicio adquirido.

En términos generales, el Inadem no cumplió con las disposiciones legales y normativas aplicables en la materia, indica el órgano fiscalizador. Hubo deficiencias en la operación y seguimiento de los recursos del FNE por parte del Inadem, pues entregó recursos de apoyo a 231 organismos intermedios con desfases de 17 a 119 días hábiles y no vigiló que éstos contaran con acta constitutivas y comprobantes de domicilio actualizados, se omitieron registros de beneficiarios, no realizó 45 visitas de verificación y tampoco supervisó que dichos organismos entregaran su informe final, sentencia la ASF.

El viernes pasado, durante la entrega del Premio Nacional del Emprendedor, encabezada por el presidente Enrique Peña Nieto, se destacó la importancia de las Mipymes para la economía nacional así como el respaldo que tienen del gobierno federal. Las Mipymes en el país suman 5 millones 654 mil 14 establecimientos, lo que representa 95.3 por ciento del total de empresas.

Según datos oficiales, el crédito a las Mipymes creció 69.3 por ciento en los primeros tres años de este sexenio, y el año pasado la banca les otorgó 843 mil créditos, es decir 24.7 por ciento más. El gobierno de Peña Nieto creó el Inadem en 2013 para fomentar la cultura emprendedora, apoyar a las Miypmes para su consolidación y crecimiento, e incluso impulsar su inserción en los mercados internacionales.

Sin embargo, los resultados de la fiscalización de la cuenta pública del segundo año de gobierno del presidente Peña Nieto destacan irregularidades en los apoyos que otorga el Inadem a las Mipymes. La auditoría reveló que el Inadem no estableció indicadores ni metas para evaluar el cumplimiento del objetivo sobre la creación de empresas ni estableció mecanismos de seguimiento para verificar el impacto que tuvieron los subsidios otorgados a los emprendedores, puntualiza la ASF.