Veinticuatro migrantes centroamericanos, entre ellos dos menores de edad, fueron rescatados durante un operativo realizado en la cabecera municipal de Altamira por la Gendarmería Nacional, así como por las policías estatal y ministerial de Tamaulipas. Los centroamericanos estaban privados de la libertad en un inmueble de la colonia La Puerta, donde los ocultaron sujetos armados que los interceptaron cuando se desplazaban en un autobús de Tampico, Tamaulipas, a Monterrey, Nuevo León, con intención de llegar a Nuevo Laredo –también en la entidad tamaulipeca– para cruzar la frontera.

El Grupo de Coordinación Tamaulipas (GCT) informó que los rescatados declararon que el lunes pasado en Tampico abordaron un autobús y luego de pasar por una estación de revisión fitosanitaria en Altamira, varones armados que se desplazaban en varios vehículos los privaron de la libertad, y a otros pasajeros los dejaron continuar su viaje.

Pusieron los carros enfrente (del autobús) y nos bajaron, de allí nos subieron a un carro y nos llevaron a un monte, narró Wilber, unos de los migrantes. Indicó que una vez en Altamira, los plagiarios “nos amarraron las manos. Eran como las 10 y media cuando nos bajaron del bus.

No nos golpearon ni nos dijeron nada, sólo nos amarraron y nos pidieron los números (telefónicos) de nuestros familiares y les di el de mi papá y le iban a hablar para pedirle plata, narró una de las dos mujeres que iban con los centroamericanos.

El plagio se reportó al GCT antes de las 23 horas del lunes, y en ese momento se activó el operativo para liberar a los migrantes, que finalmente fueron encontrados poco después del mediodía del martes en una gasolinera de la ciudad de Altamira. Nos llevaban en un microbús y cuando se enfrenó una señora se tiró del bus y todos nos tiramos del bus y nos metimos a una gasolinera y una señora le habló a la policía para decirles que estábamos allí, dijo uno de los centroamericanos.