Las malas decisiones respecto del programa Hoy no circula pusieron en circulación 600 mil vehículos más en los pasados ocho meses, que se sumaron a los 5.5 millones existentes, y colocaron a la ciudad a punto de un colapso vial, advirtió Daniel Zamudio, de la organización El Poder del Consumidor.

La resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de otorgar el holograma cero sólo con cumplir con el número de emisiones permitidas, sin importar el modelo, agudizó el ya grave problema de movilidad, sin contar con que cada año se incorporan 250 mil nuevas unidades al parque vehicular.

Con ello, la velocidad de circulación se ha reducido de forma alarmante de 40 a ocho kilómetros por hora en las denominadas horas pico, en el cuarto de siglo reciente, provocando que una persona invierta hasta cinco horas en sus traslados diarios y destine la mitad de los ingresos familiares en transporte, señaló.

En el foro Colapso vial: el futuro de la movilidad en la zona metropolitana del valle de México, Jimena Iracheta, especialista en gestión y administración de la ciudad, explicó que la expansión de desarrollos inmobiliarios y asentamientos irregulares muy alejados genera que la gente inverta más tiempo y dinero en trasladarse.

Las deficiencias en la movilidad provocan una fuga de 3.3 mil millones de horas-hombre al día, que se traduce en 33 mil millones de pesos perdidos por las congestiones viales, pues en la pasada década el parque vehicular en México ha crecido más del doble que el de Canadá y Estados Unidos, indicó.

La creación de un sistema de transporte público conectado, donde el Metro, el Metrobús, el Trolebús, los taxis y otros vehículos puedan trabajar de forma articulada, va lento y los pequeños progresos muestran rápidamente señales de deterioro, particularmente en los dos primeros servicios, afirmó Carlos Romero.

El especialista en urbanismo y movilidad señaló que no existe una coordinación entre las políticas de transporte y de desarrollo urbano, destinándose en los tres años anteriores más de 65 por ciento del presupuesto de movilidad a infraestructura vial y 35 por ciento a transporte público.

Pese a que los automóviles particulares cubren sólo 16 por ciento de la demanda de transporte y su ocupación es inferior a dos personas, en promedio, ocupa 50 veces más espacio que si una persona viajara en transporte público; además es altamente contaminante.

El director de Ciudad Humana México, Roberto Remes, apremió a las autoridades capitalinas a gastar más en transporte público, pues aun cuando muchos automóviles se emplacan en otras entidades, por las fotomultas, siguen circulando aquí y el riesgo de colapso vial está latente.

Coincidieron en señalr la necesidad de ampliar las líneas del Metro; renovar el transporte público con una estrategia que mejore su operación y cuente con carriles exclusivos; fijar impuestos verdes a automóviles y aplicarles cargos por congestión, y restringir la oferta de estacionamientos.

No se trata de cambiar microbuses por camiones morados, que siguen operando igual, sino de ofrecer un servicio de calidad que beneficie a los usuarios, pues no podemos castigar al auto si las autoridades no ofrecen un mejor transporte, y se requerirían por lo menos 20 mil millones de pesos para la sustitución y ampliación del Metrobús o el Metro, agregaron.