En los comicios que se efectuarán en junio próximo, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) continuará con sólo seis de sus siete integrantes, como lo ha hecho desde abril del año pasado, debido a que el PRI en el Senado insiste en mantener congelado el nombramiento del magistrado faltante, que habrá de sustituir a Alejandro Luna Ramos.

Los coordinadores de PRD y PAN en esa cámara del Congreso, Miguel Barbosa y Fernando Herrera, respectivamente, reconocieron que lo más probable es que el nombramiento se resuelva hasta octubre, cuando se deberá renovar toda la sala superior del TEPJF, debido a que hay un cálculo político del gobierno de Enrique Peña Nieto y de su partido, el PRI, para no desahogar ese punto, pues prefieren un tribunal controlable.

Barbosa hizo notar que el PRI detuvo el proceso de selección de la terna que remitió la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en marzo del año pasado, porque ni PRD ni PAN aceptaron al candidato favorito del gobierno y el tiempo fue pasando. Nosotros seguimos insistiendo en que la vacante su cubra, aunque sólo sea hasta octubre, pero no hay voluntad del partido del gobierno para resolverlo.

Además, agregó, es poco probable que algún magistrado aceptara el cargo sólo por ocho meses, pues quien resultara electo no podría ser ratificado ni participar en el proceso de renovación de la sala superior, el próximo mes de octubre.

El senador perredista señaló que el TEPJF funcionó con sólo seis magistrados en el proceso electoral del año pasado y así volverá a ocurrir en 2016, lo que dará al presidente de ese órgano la posibilidad de ejercer el voto de calidad.

Es una situación delicada, advirtió Barbosa, porque desde la Constitución se previó que órganos como el TEPJF tuvieran una conformación impar, para evitar que en caso de empate la decisión sobre controversias electorales no recaiga de manera central en el magistrado presidente.

Los integrantes de la terna, Javier Aguayo Silva, Enrique Aguirre Saldívar y Julio César Cruz Ricárdez, comparecieron ante la Comisión de Justicia en marzo de 2015, y en abril de ese año estaba listo el dictamen para votar a alguno de ellos, pero el PRI pidió que se retirara de la orden del día. El periodo de sesiones concluyó y casi un año después la situación es la misma.

El coordinador del PAN en el Senado, Fernando Herrera, coincidió en que el PRI dejó arrastrar los tiempos por cálculos políticos, ya que le acomoda más a sus intereses un TEPJF con sólo seis integrantes. “No les importa que el Senado esté en un error, pues ni siquiera se regresó la terna a la SCJN cuando ninguno de los candidatos propuestos tuvo consenso.